Los taurinos quisieron botar a los mendigos de la plaza de Acho, pero se fueron con las orejas cortadas

Andy Livise
Pienso, luego me achoro. @Elcholaco
Intervención: Útero.Pe
La plaza de Acho ha dejado la sangre de lado para resguardar la vida, específicamente la de los indigentes que serán recibidos en ese lugar durante esta pandemia. La acción dirigida por la Municipalidad de Lima es tal vez la única chamba buena que ha ejecutado Muñoz desde que asumió la alcaldía, pero algunos taurinos igual reclamaron.

Sí, existe esta asociación en pleno siglo XXI. Imagen: ACTP
La Asociación Cultural Taurina del Perú, un grupo de viejos lesbianos amantes de la tauromaquia, demostró su ‘amor por la vida’ con una protesta contra el albergue provisional. No porque los mendigos les afeen la plaza. No, no seas malpensado con los amigos de Maki. Sino porque el lugar es un Patrimonio Cultural y porque tiene muchas bacterias (que no son ellos, ojo).

Él es Jorge Luis Pérez, el presidente de la asociación que dice que su lugar favorito tiene bacterias.
Y como la cosa va en serio con estos hombres modernos de la Edad Media, decidieron denunciar a Muñoz ante el Ministerio de Cultura. Lo acusaron por la afectación de un patrimonio cultural de la Nación al «levantar un campamento minero dentro de la Plaza de Acho».

Jorge Luis Pérez compartió el reclamo que hizo ante el Mincul. Imagen: Facebook
Con las orejas cortadas
Pero los taurinos no pueden hacer más que ese reclamo público porque la Plaza de Acho —aunque no parezca—no les pertenece a ellos, sino a la Beneficencia, una entidad adscrita a la Municipalidad de Lima. Y cuando se conoció su pataleta, la Beneficencia no les dio ni bola. Es más, siguieron agradeciendo el apoyo a la iniciativa solidaria.

Imagen: Captura de Facebook
Muñoz también les dio su chiquita: «Qué pena que haya gente así que no tenga corazón, que no priorice la protección de los seres humanos y la vida». Y la remató con un «Yo me preguntaría, ¿qué buena obra han hecho ellos en las últimas 24 horas?». Malhablado el Gringo Karl. Aquí responderemos su pregunta con una buena obra del presidente de la asociación:

Seguro este tío taurino es de los que aplaude en el toque de queda. No tenemos pruebas, pero tampoco dudas. Imagen: Captura de Facebook
La estocada final contra los amantes del bistec crudo vino del Ministerio de Cultura, con un comunicado en el que les respondieron que el uso de la plaza como albergue para los indigentes era viable durante la emergencia por el covid-19.
«Coincidimos con la necesidad de acondicionar este importante espacio patrimonial para que dichas personas accedan a un recinto protegido. (…) El Ministerio de Cultura manifiesta su solidaridad y considera que esta es una oportunidad crucial para demostrar que nuestro Patrimonio Cultural puede también estar al servicio de los más vulnerables (…)».

Imagen: Mincul
La iniciativa es tan buena que hasta la revista Time la ha destacado:
Watch: The oldest bullfighting arena in Latin America has been converted into a refuge for homeless people. The arena in Lima, Peru will have 150 beds and provide some healthcare and food to homeless people as the nation locks down to slow the spread of coronavirus pic.twitter.com/m9crcWIkzh
— TIME (@TIME) April 1, 2020
En conclusión, los taurinos entraron al ruedo con las banderillas desenvainadas y se fueron con las orejas cortadas. Al menos esta corrida sirvió para reafirmar que aman tanto la vida como el mismísimo coronavirus.

Así quedaron. Intervención: Útero.Pe
Más procrastinación
