Cuando pensabas que no existían peores personas que las que encierran a sus trabajadores, aparecieron estos
Laura Grados
@lauletrasA cuatro días del incendio en la galería Nicolini que acabó con la vida de dos trabajadores quienes realizaban sus actividades en condiciones de esclavitud, la discusión se centra ahora en los derechos laborales en el Perú.
ese que quieren indultar, recuerden, fue el mayor impulsador de la informalidad en el Perú. el que rebajó todos los estándares laborales.
— Marco Sifuentes (@ocram) 26 de junio de 2017
A Jorge Luis Humán Villalobos y a Hovy Herrera Alania los dejaban encerrados, con candado, en un cuarto prefabricado y sin ventanas, improvisado como taller en el último piso del edificio ubicado en Las Malvinas. Ambos murieron porque no pudieron escapar. Ganaban 20 soles al día. No tenían beneficios laborales. Las redes no son ajenas a este hecho por eso varios usuarios empezaron un debate acerca de cómo las pequeñas y grandes empresas incumplen distintas normas laborales.
Primero vimos a un alcalde derrotado:
Acabo de escuchar al Alcalde de Lima, sí, el de la @MuniLima , el «mejor de todos los tiempos’ decir que la informalidad es un ESTILO. pic.twitter.com/xjp9bV2KQ6
— Paco Sanseviero (@pacosanseviero) 26 de junio de 2017
Luego el tema continuó con este tuit del columnista de Perú 21, Luis Davelouis.
«Si lo dejas ser y no intervienes, el mercado se acomoda muy bien solo y se autoregula. Intervenir crea sobre costos que pagan las personas» pic.twitter.com/7XC37lQmeT
— Luis Davelouis (@LDavelouis) 23 de junio de 2017
El intercambio de opiniones iba bien hasta que empezaron los tuits random:
Este tuit, escrito por el analista de Gestión TV y magíster en Responsabilidad Social según su perfil en Twitter, fue respondido de inmediato por la arquitecta y urbanista, Mariana Alegre:
Y justo cuando hablaban del modelo, juaz, salieron otros trolls:
A los pocos minutos, José Ignacio Beteta aclaró que su primer tuit había sido sacado de contexto porque él se refería solo a las empresa transnacionales.
Pero otros usuarios respondieron que su explicación tampoco es que le exima de culpa.
Lo cierto es que los sueldos bajos y las malas condiciones laborales que sufren actualmente miles de trabajadores peruanos, fueron propicias gracias a una ley aprobada durante el gobierno de Alberto Fujimori. El DL 728 permitió, entre otras cosas, la creación de los contratos temporales, la tercerización de servicios (services) y los «periodos de prueba de tres meses» antes de tener «derecho a la estabilidad laboral». Todo esto bajo la excusa de crear más puestos de trabajo. Más de 20 años después lo único que se logró fue la precarización del empleo con sueldos por debajo del promedio en la región y una informalidad y desigualdad social que ya parecen un símbolo del escudo nacional.