Los Tupamaros, brazo armado del chavismo y fans del MRTA peruano

A estas alturas, todo el mundo ha visto esta imagen:

Estudiante Bassil Da Costa, asesinado por el chavismo. Foto: AP.

(Todo el mundo, claro, a menos que estés en Venezuela, en el que se ha censurado toda imagen «que promueva la violencia», según el gobierno de Maduro.)

¿Cómo se desató la violencia? Infobae cuenta cómo terminó la vida de tres personas:

El ataque se produjo cuando los estudiantes ya estaban desconcentrando. Habían llegado hasta la Fiscalía General como parte de su jornada de movilizaciones nacionales. Exigían la liberación de los jóvenes arrestados días atrás en otra protesta. Según pudo constatar un fotógrafo de AFP, en ese momento una banda de motorizados armados abrió fuego contra la manifestación.

Aquí los que llegaron:

!URGENTE! llegaron los tupamaros a la fiscalia !Tiros al aire! Extra oficial: 2 heridos. #360ucv #Lasalida pic.twitter.com/lQkbXqQcgo

— Visión360 (@360UCV) February 12, 2014

¿Pero quiénes son los Tupamaros y qué tiene que ver el MRTA peruano?

Hace ya algunos años fui a Caracas, intrigado por los rumores de una «Unidad Táctica de Combate Néstor Zerpa Cartolini» (sic). Este fue un grupo armado pro-chavista que tuvo algunas apariciones esporádicas a lo largo de los años.

Ya en el 2006, era evidente que los «Cartolini» eran una expresión más de los Tupamaros, unos exguerrilleros que apoyaban el régimen de Chávez. Cuando fui a Caracas, los Tupamaros se deshicieron en elogios al terrorista que secuestró la residencia del embajador de Japón. Este es el reportaje:

Han pasado los años, y los «Cartolini» no figuran más pero los Tupamaros expandieron su poder en Caracas:

Su expansión fue tal que, hoy en día, cuentan con radios y canales de televisión y controlan diversas zonas carenciadas de Caracas, especialmente en el 23 de enero. Ubicado a metros del Palacio de Miraflores, sede del Gobierno, el barrio está conformado por una serie de edificios en serie construidos sobre una colina. El lugar siempre ha sido bastión electoral del chavismo.

El poder que cobraron en estas zonas los llevó a contar con la protección de sus habitantes. Allí, los Tupamaros «limpian» el área de aquellos delincuentes que no les son fieles. Sin embargo, ellos mismos en reiteradas ocasiones han sido acusados por ataques a comercios e importantes edificios por considerarlos oligarcas y burgueses.

Esta es la gente que tiene el poder en Venezuela. La gente que cierta izquierda peruana insiste en defender. La confusión de los tupamaros respecto de los emerretitas es idéntica a la confusión de nuestra izquierda respecto del chavismo.