denuncia , Lima , noticias , sociedad Viernes, 15 abril 2016

Esta es la columna por la que el periodista Rafo León podría ser condenado a prisión

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Foto: Facebook

El periodista Rafo León vive uno de los peores momentos de su vida. Hace unos días publicó, en su cuenta de Facebook, que podría ser condenado a tres años de cárcel y a pagar una reparación civil de S/5 millones, debido a una denuncia en su contra interpuesta por Martha Meier Miró Quesada, la Editora de Fin de Semana de El Comercio durante el 2014.

¿Recuerdas qué pasó entre ellos?

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Elaboración Utero.pe

En junio del 2014, León escribió una columna de opinión en la que ironizaba sobre una columna en El Comercio escrita por Meier. El artículo de la entonces editora contenía muchas críticas contra Susana Villarán. Rafo salió en defensa de la exalcaldesa y Meier no lo tomó nada bien. Según indica el periodista, Meier lo denunció por difamación, misoginia e incluso por haber sido despedida de El Comercio.

Ahora sí, con ustedes…

Esta es la columna completa de Rafo León publicada originalmente en la revista Caretas

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Captura: vía Juan Carlos Ortecho

“¿Qué hacemos con la primita?”

Como ya me está persiguiendo ese alemán cuyo nombre he olvidado, me pasa que a veces me confundo y creo estar viviendo algo que no es lo que creo sino otra cosa. Me ocurrió en mi escritorio la mañana del 16 de julio pasado, cuando como lo hago rutinariamente, revisaba los diarios con mi expresso recién hecho al costado. En uno de esos periódicos leí algo y lo volví a leer, algo pasaba. Recordé los consejos de mi neurólogo para manejar el Alzheimer: relajarse y hacer el esfuerzo por conectar las cosas del entorno hasta darles su dimensión real, y evaporar la fantasía. Empecé reconociendo que no podía estar leyendo La Chuchi ni El Tío por la sencilla razón de que estos son tabloides y en cambio El Comercio tiene formato grandazo. Muy bien. Pero sobrevivía eso en lo que estaba posando mi vista que tercamente me confundía, ese algo muy asintónico no solo atribuible a los conectores de mi cerebro.

Se trataba de un editorial escrito por la señora Martha Meier Miró Quesada, titulado “El síndrome de Susy”, dedicado de comienzo a fin a denostar a la persona de la alcaldesa Susana Villarán, sin dar un solo argumento que evidencie una discrepancia o un desentendimiento. Era una retahíla de ironías de baja estofa y de insultos mal barajados, del que traigo un par de perlas, aparte del punto de partida en el que se sostiene categóricamente que la gestión de Villarán es “la más patética que ha padecido nuestra ciudad”, sin dotarnos de un solo porqué. Ahí van:

“Nada es su culpa ni la de su club de ineptos franeleros, perdón, ‘chalineros’. La señora bien podría pasar a la historia por ser víctima de un nuevo y desconocido trastorno de personalidad: el “síndrome de Susy»:”.

“La señora cree que ganará en las elecciones de octubre. Un síntoma más: lanzarse a piscinas vacías y aceptar postular por un partido que no es de ella; es decir, vivir en el planeta lalalá”

La Editora General de un diario que tiene 175 años de vida se manda contra la persona de una autoridad tal cual en las más corruptas y viles emisoras de ciertas provincias son trajinadas, no las gestiones, la identidad de los gestores. Trolleo en el Decano, bajeza en uno de los diarios más antiguos, y por mucho tiempo, respetado en América del Sur.

Un periódico con tan larga vida, en un Perú que nunca está tranquilo, de hecho tiene que haber tenido resbalones, cometido errores, haber permitido que sus fobias y sus filias interfieran en la labor del periodista. Eso se entiende, y por ello la imagen de El Comercio es aún sólida y respetada en algunos sectores de nuestra sociedad. Porque además en su directorio y en sus páginas hay nombres de gentes que califican de largo para decentes, coherentes y mesurados. Por eso yo estoy seguro de que las cabezas del diario, hoy, lo que más quieren ser zafarse de la prima insurrecta que tanto impacto negativo viene causando desde que tomó el cargo.

Personaje extraño MMMQ, su militante ecologismo (de un océano de extensión y un centímetro de profundidad), la viene distinguiendo por años como “su tema”. Pero para ser un auténtico ecologista hay que saber respetar también las áreas de amortiguamiento de otros derechos que tenemos los seres humanos, como la libertad de elegir, la opción del laicismo, el pensamiento sin límites. Sin embargo, resulta que mientras la señora defiende a las taricayas de Pacaya Samiria, en una columna vecina se alía con el cardenal Cipriani en las opiniones más cochambrosas y naftalineras posibles, sobre la unión civil, el aborto terapéutico, la defensa cerrada y unívoca de la familia occidental y cristiana. Y un par de páginas más allá, en Sociales, aparece envuelta en zorros, tomando el té con las cuatro condesas que dan lustre a nuestra Lima.

El Comercio está en pleno turning point, acelerado por la muerte de Fritz Dubois. Es el momento para desembarazarse de una persona que hace un periodismo irresponsable y más. Y desde acá me aúno al pedido de Michel Azcueta, formulado en carta pública, para que MMMQ pida disculpas a la alcaldesa Susana Villarán. Es lo justo, varón.

El próximo 3 de mayo se leerá la sentencia contra Rafo León, quien es defendido por el abogado Roberto Pereira.

Puedes leer aquí el post de Facebook en el que Rafo León explica toda su situación actual