Esta valiente procuradora chocó con todo el mundo y no le pasó nada… hasta que se metió con Nadine

Vamos a empezar esta nota con un resumen que hace Gino Costa sobre el trabajo de Julia Príncipe al frente de la Procuraduría de Lavado de Activos:

Lleva cinco años al frente de la Procuraduría contra el Lavado de Activos. Largos años que le han permitido acumular centenares de investigaciones, las más importantes asociadas con Rodolfo Orellana. Su solitario y corajudo batallar contra este la ha hecho acreedora de una treintena de denuncias, de las que se ha tenido que defender sola, porque el Estado no la defiende.

Ha sido objeto de múltiples campañas de difamación en los pasquines y programas televisivos de Orellana, quien, además, le hace seguimiento a través de Benedicto Jiménez, su principal sabueso, el mismo que acabó con Abimael Guzmán y en los últimos años, en metamorfosis incomprensible, se pasó a las filas del crimen. La cobardía de sus perseguidores llegó al extremo de mandarle sicarios a su domicilio.

Imagen: Útero.Pe

Ahora continuemos

Como era de suponerse, después de varias semanas de enfrentamiento con el ministro de Justicia, con el premier y hasta con el presidente de la República, Julia Príncipe ha sido destituida de su cargo como Procuradora de Lavado de Activos.

La resolución de su salida fue publicada hoy en el diario oficial El Peruano, justo dos días antes de que el Congreso de la República debata la moción de censura contra el ministro de Justicia, Gustavo Adrianzén.

Pero vayamos parte por parte. En su paso por la Procuraduría de Lavado de Activos, Julia Príncipe ha realizado un destacado y respetable trabajo. Por ejemplo:

1. Caso Michael Urtecho

¿Recuerdan el caso del congresista que se apropiaba de parte del sueldo de sus trabajadores? Ya. Julia Príncipe lo denunció por el delito de Lavado de Activos en agravio del Estado porque no acreditó con qué dinero se hizo de un terreno en Trujillo ni con qué plata construyó ahí mismo un moderno edificio con departamentos y todo.

2. Comunicore

Fue Julia Príncipe quien solicitó dos veces al Ministerio Público, se amplíe la investigación contra el alcalde Luis Castañeda con el fin de que responde por el irregular pago de 14.9 millones de soles a la empresa Comunicore.

3. Orellana

El trabajo de Príncipe ha sido vital para la caída de la más grande mafia -después de la de Montesinos y Fujimori- que ha aparecido en el Perú y que estaba dirigida por Rodolfo Orellana.

De hecho, por más de tres años fue amenazada y acosada judicialmente por este clan, tanto que el Congreso pidió protección para ella.

El principio del fin

Pero su buen desempeño al frente de la Procuraduría de Lavado de Activos no fue suficiente para mantener la confianza del presidente de la República. El enfrentamiento empezó en junio de este año, cuando denunció públicamente que por primera vez en sus más de doce años como procuradora pública, se le había pedido explicaciones por haber ofrecido declaraciones (sobre el caso de las agendas de Nadine Heredia y el financiamiento del Partido Nacionalista) en el programa Panorama y RPP Noticias.

«Puedo hablar de [Rodolfo] Orellana del Caso Ecoteva, de empresas mineras, de Martín Belaunde Lossio, de César Álvarez y de cualquiera, y no se me han pedido explicaciones», dijo en ese momento.

A pesar de todo ello, Julia Príncipe continuó con sus investigaciones en el caso y fue ella la que pidió la inclusión de Ilan Heredia en la investigación fiscal. Ahora todos sabemos que el hermano de la primera dama manejó casi 18 millones de soles de la campaña del nacionalismo.

Pero parece que era la única a la que le pidieron explicaciones…

El exprocurador anticorrupción, Julio Arbizu, se mostró en contra de la mordaza de que estaba siendo víctima Príncipe, argumentando que él nunca solicitó ningún permiso para declarar ante la prensa.

todo indica que hay que pedir permiso para declarar solo si se trata de Nadine.

El enfrentamiento con el premier

Cuando la discusión sobre la aparente mordaza en su contra continuaba, el primer ministro, Pedro Cateriano, respaldó públicamente a Adrianzén y además cuestionó el accionar de Príncipe al decir que la exprocuradora sí pedía permiso para declarar a la prensa a otros gobiernos.

«La procuradora que lo ha acusado no ha sido sincera con el país. Si ella consideraba que este mecanismo, que no ha sido establecido por este Gobierno, no era justo, ¿por qué pedía permisos a otros ministros de Justicia? Además, con el agravante de que el actual ministro de Justicia nunca le ha negado ningún permiso […] ¿Ante qué situación estamos? Que un funcionario público se niega a acatar la ley», argumentó.

Ante ello, la exprocuradora contestó diciendo que Cateriano estaba mal informado, puesto que durante el gobierno aprista, solicitó permiso a la entonces ministra de Justicia, Rosario Fernández, para hacer declaraciones en defensa de ella y su familia, en momentos en que la mafia de Orellana estaba difamándola.

La cobardía como mejor defensa

Tras la destitución de Príncipe, el ministro Adrianzén dio una entrevista hoy en RPP. Entre otras cosas, acusó a la exfuncionaria pública de haber estado casada con un investigado por lavado de activos. Y adivinen en qué se basa el titular de Justicia para hacer tales declaraciones:

sí, en una publicación del pasquín de Orellana.
Imagen: Facebook de Martín Hidalgo.

Y ¿Quién denunció al exesposo de Príncipe por el delito de lavado de activos? Nada más y nada menos que Benedicto Jiménez.

Julia Príncipe ya no es más procuradora y todo por prestar declaraciones acerca de una investigación contra el partido de gobierno. Este no es un buen precedente ni para la libertad de expresión ni para la democracia en el país.