historia , politica , violencia Martes, 7 abril 2015

VIDEO: Martha Chávez dice que no secuestraron a Gorriti, sino que fue por un café. Aquí su dosis de Memorex

Todos los que siguen en serio este blog saben que somos fans de Martha Chávez. HIPER FANS. Siempre la retuiteamos y todo. El hecho es que casi casi nos perdimos esta entrevista suya, pero Gerardo Lipe, por suerte, vino al rescate.

El video incluye la respuesta completa de Martha, para que nadie diga que la hemos sacado de contexto.

A nosotros nos parecen peligrosas las reescrituras tan alegres de la historia. Pero tampoco dudamos –cómo se les ocurre– de la palabra de la doctora Chávez. Así que nos decidimos a buscar el incidente en el que Gorriti, en medio de un secuestro afrontado con huelga de hambre, decide ir al Starbucks instalado en los sótanos del Pentagonito o algo así.

Escarbamos en varios documentos. Lo primero es lo que escribió Gorriti apenas fue liberado. Aquí, un extracto. Esto ocurre apenas los militares lo sacan de su casa:

Al salir, vi el vehículo que me esperaba: una camioneta Cherokee, sin matrícula, con lunas oscuras, de las donadas recientemente por la CIA al Servicio de Inteligencia Nacional y del Ejército, y me di cuenta de que las cosas eran graves. En los alrededores 40 ó 50 soldados uniformados que habían rodeado la manzana regresaron a sus camiones.

Peor fue cuando la camioneta se dirigió hacia la extensa área que ocupa el Cuartel General del Ejército, en Monterrico. Entró por una puerta trasera con los cristales levantados, sin permitirle siquiera al oficial de centinela ver el interior. La camioneta aparcó en un área deshabitada, y me llevaron a través de corredores oscuros hasta un ala de pequeñas habitaciones. Ahí me pusieron en manos de otro grupo, los carceleros.

Éstos me depositaron en un cuarto pequeño y bastante sucio, con un baño aún más sucio al lado, y cerraron la puerta con varios candados. Estaba secuestrado. Mi arresto había sido clandestino y mi paradero era secreto. Supe entonces que cualquier cosa, aun de las más monstruosas, podía suceder. Después de años de cubrir la guerra interna en Perú conocía de sobra los horrores que suelen seguir a la detención-desaparición.

Decidí resistir pasivamente, no cooperando en nada, e iniciando de inmediato una huelga de hambre. Luego, me propuse dormir lo menos posible, a intervalos irregulares, para que siempre me encontraran alerta. Me mantuve activo caminando a paso vivo por la celda hora tras hora. Me prohibí pensamientos esperanzadores. En momentos como ése la esperanza es dañina.

Gorriti le contó la historia completa a La Mula en esta entrevista, que recomiendo ver completa:

Además, acá está el video del momento en el que, al día siguiente de su liberación, Gorriti acude a una conferencia de prensa de Fujimori y lo encara respecto de su secuestro. Lo notable es cómo Fujimori está enterado al dedillo de lo sucedido:

Algo que debe quedar en claro es que Gorriti es, de alguna manera, la persona que descubrió a Montesinos, el artífice detrás de esta portada de Caretas del 1983, nueve años antes del golpe.

765-montesinos-en-1983

Fotazo histórica de Carlos Saavedra

El secuestro de Gorriti es una de las mejores pruebas de la simbiosis Fujimori – Montesinos. Y, por supuesto, es uno de los delitos por los cuales nuestro querido exdictador se pudre en la cárcel, como corresponde. Si lo dudan, aquí pueden leer la sentencia de la Corte Suprema contra Fujimori por el caso Gorriti, en un bonito pdf.

Pero, lamentablemente, no había nada de café allí tampoco.

You rock, girl

No importa. You rock, girl. Foto: Perú.21

Hemos buscado la palabra «café» en todos estos testimonios y no lo encontramos. Seguiremos buscando, doctora Chávez. No descansaremos.