La tragedia del Chosicano: 4 muertos, 50 heridos y 1 alcalde que no le cancela la licencia

Carretera Central, ayer. Foto: El Comercio

El mejor resumen sobre lo que pasó ayer nos lo da El Búho del Trome:

ASESINOS DEL VOLANTE: Es inaudito que las autoridades permitan que sigan operando empresas como ‘El Chosicano’, ‘Orión’ y otras, que tienen en su haber decenas de muertos porque sus conductores corren como bestias, sin respetar a nada ni nadie. Sus choferes no tienen brevetes y, si los tienen, registran decenas de papeletas. Ayer, «dos Custers de ‘El Chosicano’, que competían por pasajeros en la Carretera Central, se estrellaron” y provocaron la muerte de una persona, además de dejar a más de 80 heridos, algunos de ellos graves. Deben ser duramente castigados los conductores criminales, los dueños de los vehículos por contratarlos, y las empresas por dar cabida a tanto energúmeno y no hacerse responsables de las consecuencias.

Siempre tan preciso, excepto en las cifras que ya se actualizaron: hay cuatro muertos.

¿Qué pasó? Pues la misma historia de siempre

Choque múltiple. Foto: Correo

Por ganar pasajeros, una de las unidades impactó contra la otra (sí, ambas de la misma ruta) y también contra una combi y un auto. Además, un testigo afirma que el carro que se adelantó atropelló a un estudiante que estaba en el paradero.

Y decir «la misma historia de siempre» no es exagerar. Si googleas imágenes de «Chosicano», más de la mitad son de choques. Si a esa búsqueda le agregas «Carretera Central», todas las fotos son de tragedias. Y encima el buscador te sugiere la palabra «accidente», como para que encuentres lo que estás buscando.

Acá tenemos que hacer una precisión: ninguna empresa se llama «Chosicano». Pasa que así les dicen a todas las empresas que van y vienen desde Chosica hacia Lima y viceversa. Estos son los nombres de las empresas que cubren esa ruta:

• EMTRASMUSA (Empresa de Transportes Señor de Muruhuay)

• ETYSLCHSA (Empresa de Transportes y Servicios Lima-Chosica S.A.)

• Empresa Nueva Era

Según El Comercio, los involucrados en este choque son las empresas Empresa de Transportes, Servicios Múltiples y Comercialización 14 de Mayo, así como la empresa ETYSLCHSA.

Ahí se lee bien claro qué empresa es. Foto: El Comercio

Y para empeorar las cosas:

• El chofer que causó el accidente no tiene brevete

• Ambas unidades deben miles de soles en papeletas

• Una de las dos unidades no tiene SOAT (y encima tiene orden de captura)

¿Y Castañeda?

Bueno, «las autoridades ya empezaron a movilizarse»

Así informa La República:

Eduardo Osterling, subgerente de Transporte Urbano de la Municipalidad de Lima, anunció un proceso sancionador para la empresa que protagonizó el choque en la Carretera Central.

En tanto, José Guevara, vocero del Ministerio de Justicia, comunicó que dicho sector dispondrá un equipo de especialistas para asesorar a las familias de los heridos.

Aunque Castañeda solo ha dado la cara para decir esto (y sobre el choque, nada):

El proceso sancionador anunciado por Osterling, el Subgerente de Transporte, ya tomó una decisión: retirarle la licencia de circulación a las unidades que causaron el accidente. Ojo: a las unidades, no a la empresa. Dice Osterling que no pueden hacerlo porque la actual ordenanza -supuestamente aprobada por la gestión anterior- no les permite hacerlo. Ya pidió que se cambie (aunque sabemos que retirar la licencia no es la solución).

Pero mientras tanto, Castañeda anda con esto:

Y parece que no tiene intención de dar ninguna declaración respecto a lo que es necesario hacer para acabar con la informalidad que él parece defender porque… no hace nada para frenarla

¿Sabes cuál es el verdadero problema? Pues algo que ya te habíamos advertido:

Lo leíste primero aquí.

No olvides limeño que fue un 28 de febrero que la Municipalidad de Lima aprobó la ordenanza 1876 para renovar por tres años la autorización de 414 rutas de transporte público. ¿Sabes quién estaba entre ellas? Pues las que causaron este accidente.

Date cuenta, limeño: es más fácil pintar paredes que hacer cambios reales y que salven vidas.