periodismo , sociedad , violencia Sábado, 3 febrero 2007

Más sobre Sacharaccay

imagen Frecuencia Latina - La Ventana IndiscretaLas ejecuciones de Sacharaccay no han tenido mucha cobertura en los medios, salvo un artículo de Caretas, que acierta relacionándolo al debate sobre la pena de muerte (pero yerra en algunos detallitos).

Ayer, la agencia EFE envió un despacho con una acertada visión macro del tema:

El reciente linchamiento de cinco presuntos delincuentes en Ayacucho se ha unido a la lista a los 72 casos de juicios populares por esta causa, ocurridos en Perú a lo largo del año pasado, como resultado de una acrecentada desconfianza hacia la justicia. La mayoría de los casos de los linchamiento ocurridos en 2006 fueron en Lima, seguida por los departamentos de Puno, en el alto andino sur del país, con 23 muertes; de la sureña Tacna, en la frontera con Chile, con siete; y Cuzco, también en los Andes, con cinco, según dijeron a Efe fuentes policiales.

Me cuentan que IMASEN ha hecho una encuesta sobre derechos humanos en todo el Perú. A la pregunta «¿Usted està de acuerdo con el uso de la violencia para hacer justicia contra ladrones o delincuentes comunes?», 71% en Ayacucho dijo que si. Porcentajes similares se han registrado en otras provincias.

El escenario que se está pintando resulta escalofriantemente familiar. Hace unos días, Roberto Bustamante rescató un artículo de Eduardo Toche sobre el apogeo de Sendero Luminoso y su «justicia popular»: 

Una explicación más pertinente a la rápida expansión de esta organización terrorista tendría que incorporar también la ausencia de los aparatos estatales que debían ofrecer vías de solución a los conflictos, así como la debilidad del propio tejido social que ante la inoperancia estatal tampoco pudo construir sus mecanismos alternativos. Es así como en un primer momento, el ejercicio de la justicia senderista pudo de alguna manera legitimarse pues actuaba sobre un vacío que debía ser cubierto de alguna manera.

Hace 25 años, Sendero Luminoso cubrió ese vacío. El año pasado, Ollanta Humala quiso capitalizar a esa misma masa excluida. Todos (en Lima) nos asustamos. Pero Humala perdió, el peligro inmediato se conjuró y ufff ya nos olvidamos del tema. 

Sí, qué bonito es vivir sin temerle a un futuro calcado del pasado.

Nos vemos en la playa.

Archivo del Útero: Sacharaccay (30/01/07)
Vídeo: Las ejecuciones de Sacharaccay (La Ventana Indiscreta)
Blog: Sonia Luz Carrillo: Suicidios, linchamientos y el desagrado desde dentro
Blog: Martín Tanaka: No perder de vista lo que pasa en las regiones 
Blog: José Alejandro Godoy sobre la exclusión