politica Domingo, 2 noviembre 2014

3 consejos para Keiko Fujimori si algún día quiere ser presidenta del Perú

Hace poco, Mario Vargas Llosa dijo que haría una campaña para que Keiko Fujimori no sea elegida presidenta de la República en el 2016. Sus máximos oponentes saltaron y señalaron que todo lo que decía era producto del «rencor» y de no superar la derrota de 1990.

Nosotros les explicamos bien clarito por qué no puede ser cierto que Vargas Llosa viva resentido con Alberto Fujimori. Y sobraron argumentos. Ahora, el politólogo Steve Levitsky también le da razón al Nobel de Literatura sobre oponerse a la candidatura de Keiko.

Foto: Perú21

Foto: Perú21

Sin embargo, en su columna publicada en La República le da tres consejitos a la hija de Fujimori para que los tome en cuenta si es que quiere algún día llegar a la Presidencia.

 

Rechazar el golpe de 1992

(Difícil que pueda hacer esto)

(Difícil que pueda hacer esto)

Para Levitsky, Keiko -así como lo hizo Humala en el 2011- necesita su propia Hoja de Ruta. «Una Democrática». Y para conseguirlo, una de las primeras cosas que debería hacer es rechazar de plano el autogolpe que dio Fujimori el 3 de abril de 1992:

Keiko podría dar una serie de discursos y entrevistas de alto perfil en la cual rechaza sin ambigüedades el golpe de 1992, reconoce (y quizás denuncia) los abusos autoritarios y violaciones de derechos humanos cometidos por (y no solo bajo) el gobierno de Fujimori y se compromete plenamente a la defensa de las instituciones democráticas. 

¿Podrá? Sigamos.

 

Chotear a Martha Chávez

Foto: La República

Foto: La República

Levitsky continúa con los consejos para que el fujimorismo se renueve y demuestre un «serio compromiso con la democracia liberal». El segundo es:

Asegurar que ningún fujimorista que niega arrepentirse de su pasado autoritario sea candidato en el 2016 (o sea, chau Martha Chávez).

Ese sería un paso duro, pero interesante. Sobre todo porque estamos seguros que se enfrentaría con muchos cuadros dentro del propio fujimorismo y hasta con su padre. Vamos con el último consejito.

 

Apoyar a la CIDH

Este consejo es aún más difícil que el anterior.

Este consejo es aún más difícil que el anterior.

Este es uno de los pasos más simbólicos que podría dar Keiko Fujimori para demostrar su compromiso con los derechos humanos:

Expresar su apoyo a la Comisión Interamericana de Derechos Humanos; reunirse con grupos de derechos humanos (peruanos e internacionales); y aún si sigue discrepando con el informe de la Comisión de la Verdad y la Reconciliación, apoyar la investigación y documentación de las violaciones de derechos humanos y mostrar interés en las víctimas. 

Pasu, qué ocurra, será histórico.

Para el politólogo, todos serán pasos duros para Keiko. Sin embargo, si quiere convencer a todos de que el fujimorismo se está convirtiendo en un partido democrático, tiene que pensar si lo hace o no.  «Antes de que empiece la campaña de 2016 debería romper –en una manera pública y creíble– con el pasado autoritario del fujimorismo. Si lo hace, este columnista será el primero en aplaudir». Y muchos de sus críticos también.