noticias , politica , sociedad Sábado, 14 noviembre 2009

Cólico de gases

Como «Somos» no tiene versión virtual, me permito copiar aquí un artículo publicado hoy por Pedro Tenorio sobre la malhadada fiestita en Palacio con el Grupo 5 y las mentiras del «gran hallazgo» de gas en Camisea.

CÓLICO DE GASES

IMPRUDENCIAS. PATINADA PRESIDENCIAL SOBRE “GRAN HALLAZGO” DE GAS ESCONDE OTRA MÁS GRAVE: RESERVAS ESTARÍAN LEJOS DE CÁLCULOS SOBRE COBERTURA PARA CONSUMO INTERNO.

Por encima de los escándalos que involucran a congresistas y magistrados de la Corte Suprema, hay otros temas relativos al futuro energético del país y a la grave contaminación derivada de la informalidad minera que deberían recibir toda la atención del Ejecutivo. Sin embargo, Palacio de Gobierno transformó la frustrada elección de Lima como futura capital deportiva de América en un jolgorio por el hallazgo de nuevas reservas de gas que hasta ahora –y todavía por un tiempo más-, nadie sabe a ciencia cierta a cuánto ascenderán y si bastarán para satisfacer la demanda interna.

LA MULTITUD RUGE, extasiada al son de la música. De pronto la alegría se detiene y una voz se sobrepone al eco de los últimos acordes: “Todo esto es un regalo de nuestro creador. Estoy convencido de que si seguimos con fe y decisión, él nos seguirá apoyando siempre porque Dios apoya a los pueblos que tienen fe, a los pueblos que saben cantar, que tiene alegría y que saben celebrar todo aquello que les da”.

Quien habla no es un sobrealimentado orador de ‘Pare de sufrir’, sino el presidente de la república tratando de explicar a miles de asistentes en la Plaza de Armas –y a muchos más por TV- la importancia del más reciente hallazgo de gas natural en el país.

Un vistoso escenario había sido montado en el frontis de Palacio de Gobierno para que artistas de moda como Dina Paucar, el Grupo 5 y los Hermanos Yaipén divirtieran al público, convocado la víspera del último sábado para celebrar las reservas encontradas en el hoy famoso lote 58, concesión operada desde hace poco más de un año por la brasileña Petrobrás.

Sin embargo, en realidad el evento había sido planeado días antes para festejar la ‘casi segura’ elección de Lima –al menos eso es lo que creían el presidente Alan García y sus más cercanos colaboradores- como sede de los Juegos Panamericanos 2015. Como se sabe, el propio mandatario encabezó la delegación peruana que llegó el viernes 6 hasta Guadalajara, en México, para reforzar la candidatura, pero se estrelló con el holgado triunfo de Toronto.

Más allá de la anécdota en torno a las verdaderas razones por las que el Gobierno convocó este jolgorio –que hasta cerró con abundantes fuegos artificiales-, la novedad gasífera puso sobre el tapete el debate en torno a los verdaderos alcances de este y si, efectivamente, hay razones para celebrar de manera pomposa.

NÚMEROS AL AIRE

Si bien Petrobrás confirmó  el hallazgo, hasta ahora la empresa no ha dado un estimado real de su volumen y de si existen motivos para bailar. Se supo que la estatal brasileña podría tomarse entre uno y tres meses para hacer el anuncio, pero quien sí dio rienda suelta a su entusiasmo fue el propio Jefe de Estado, quien especuló con aire de experto: “Serían cerca de 1.5 trillones de pies cúbicos (TCF por sus siglas en inglés)”. Y agregó, sin despeinarse, que con esto las reservas nacionales se situarían por encima de los 15 TCF, garantizándose así las necesidades de abastecimiento interno “hasta el año 2050”.

En el Ejecutivo ministros y asesores danzaron a ritmo de samba, pero algunos especialistas se toman la cosa con mucha clama. Carlos Herrera Descalzi –ex titular de Energía y Minas durante el gobierno de Valentín Paniagua- es tajante: “Creo que la algarabía del presidente ha sido desmesurada. Se trata sin duda de una buena noticia, pero nadie puede saber en qué magnitud lo sea”. Y explica: “Se esperaba que en esos lotes (como el 58), aledaños a Camisea, hubiera gas. Pero para que sea algo realmente importante se necesita hallar entre 5 y 10 TCF y no el trillón o trillón y medio anunciados por el mandatario”.

Según este experto, el cálculo presidencial sobre el abastecimiento a futuro carece de fundamento. “Ni de lejos podría llegar al 2050. Hay una falla absurda y lo interpreto porque el presidente usa una aproximación lineal cuando debería ser exponencial. Quiero decir que mientras el consumo de hoy alcanza los 300 millones de pies cúbicos por día, y en tres o cuatro años llegaremos a un consumo de 1,000 millones de pies cúbicos diarios –es decir, triplicando la demanda actual-, para el año proyectado por García se requerirán reservas de 50 TFC aproximadamente y no las 15 que él está anunciando”.

Como se ve, el tema no solo es complejo técnicamente, sino que demandaría una mayor capacidad de análisis entre quienes toman las decisiones respecto al consumo –y eventual exportación- de esta energía en el país.

“Sin proyectarnos a tres o cuatro décadas, el lote 58 podría llegar a tener 2 o 3 TFC. Pero al ser menos de lo que tiene Camisea nos sitúa aún lejos de las necesidades del país para los próximos años”, precisa este ex ministro.

Empero, en el Gobierno no están dispuestos a que les malogren la jarana y por eso la titular de Producción, Mercedes Aráoz, fue enfática en calificar de “agoreros” –es decir, aves de mal agüero- a todos aquellos que critiquen las buenas nuevas del régimen.

Quien sí esbozó un planteamiento mesurado fue el ministro de Energía y Minas Pedro Sánchez, quién explicó que Petrobrás solo ha confirmado el resultado de la exploración de un pozo (Urubamba 1X), pero que aún le falta entrar a tres más (Picha, Paratoni y Taini), lo que realizará en breve, con lo que se redondearía un resultado más expectante. Lo cierto es que, según confirmó el propio Sánchez, la explotación del recurso podría iniciarse en 2012 y promoverá el desarrollo del proyecto del Gasoducto Andino del Sur, el mismo que favorecerá a la población y a la industria de esa zona del país.

MUERTE DORADA

Otro tema que debería marcar la agenda pública fue puesto al descubierto por El Comercio con una serie de reportajes en torno a los graves índices de contaminación y deforestación de bosques en Madre de Dios, como consecuencia de la extracción informal y artesanal de oro.

La denuncia puso en evidencia que más de 150,000 hectáreas han sido seriamente dañadas por efecto del mercurio, elemento químico clave para la extracción aurífera pero de efectos sumamente nocivos al entrar en contacto con las personas, animales y el medioambiente. Además, de acuerdo con la información obtenida en la zona, la remoción de tierra por parte de maquinaria pesada –en manos de estos informales- está devastando bosques y ríos.

Así, según las autoridades se calcula que 800 motores succionadores de sedimentos fluviales, más de 500 máquinas pesadas –entre cargadores frontales, retroexcavadoras y volquetes- y más de una centena de dragas de diversa envergadura lesionan gravemente el ecosistema.

Esto se agrava al constatar que en los últimos cuatro años se ha duplicado la importación de mercurio al país. De acuerdo a Aduanas, de los 75 mil kilos que se importaron en 2006 se pasó a 132 mil kilos en 2008, y a casi la misma cantidad solo en lo que va de este año. Las autoridades calculan que en Madre de Dios se comercializan –sin ningún control- más de 50 mil kilos anualmente. El daño es tal que ni siquiera la importante reserva de Tambopata está exenta de riesgos.

Ante la magnitud del problema, la viceministra de Gestión Ambiental, Ana María González, anunció que el próximo sábado 21 se instalará en Puerto Maldonado un ‘grupo multisectorial’ conformado por representantes del Ministerio del Ambiente, de la Federación Nacional de Mineros Artesanales, de la Federación Minera de Madre de Dios, de la PCM, Energía y Minas y del Congreso para buscar una solución integral ante la magnitud de esta crisis.

En tanto, el ex ministro de Agricultura José Chlimper ha calculado que la explotación informal en dicha región –que genera aproximadamente el 10% de todo el oro que se produce en el país- movería unos US$1,000 millones anuales, por lo que se requiere una decidida respuesta desde el Estado.

Y por si no fuera poco, a ello se sumó el informe preparado por las consultoras Groundwater Internacional, Science Integrity y Knight Piesold Consulting según el cual 2,300 kilómetros cuadrados de La Oroya están contaminados con plomo y arsénico tras 87 años de operaciones de su fundición, hoy en manos de Doe Run. De acuerdo a los expertos, se requerirían 10 años y US$50 mil millones para recuperar las cuatro provincias de Junín actualmente afectadas. Como se ve, la preservación del ambiente empieza a reclamar acciones más contundentes.