El asesinato de 6 agricultores por defender sus tierras es noticia en el extranjero pero aquí pasa desapercibido

El viernes pasado, seis agricultores que se dedicaban a la producción maderera en Ucayali se alistaban para dormir. Sus asesinos los sorprendieron en sus viviendas del Caserío Rayal, del centro poblado Bello Paraíso, donde los maniataron para matarlos con sendos disparos en la cabeza y luego arrojarlos al río.

Entre las víctimas se encontraban:

• Jorge Calderón Campos (33).
• Elías Gamonal Mozimbite (31).
• Feliciano Córdova Abad (71).
• Edil Córdova López (41).
• Alcides Córdova López (37).
• Orlando Burillo Mendoza (53).

La noticia mereció algunas notas pequeñas en los medios nacionales, pero una publicación más extensa en el diario británico The Guardian.

Seis campesinos mueren a tiros por la batalla de derechos a la propiedad en Perú. Imagen: The Guardian

El diario inglés señala que el asesinato fue cometido por «alrededor de 40 hombres» porque «los agricultores se negaron a entregar sus tierras». Añade que quienes contrataron a los asesinos «querían apoderarse de sus terrenos para participar en el lucrativo comercio del aceite de palma». A continuación, le mete su chiquita al gobierno:

«Los observadores temen que el surgimiento del aceite de palma alimente un nuevo aumento en el tráfico de tierras, la violencia y la deforestación. Sin embargo, el gobierno peruano está promoviendo la expansión, afirmando que su cultivo no amenazará a los bosques».

La Mula.Pe, uno de los medios peruanos que ha brindado más detalles sobre el crimen, señala el nombre de la banda que estaría detrás:

«Información periodística de Pucallpa indica que detrás de este crimen estarían ‘Los Empresarios’, encabezados por Juan José García Gavilán, gerente general de la empresa arrocera Agrícola Cordillera Azul, y que actúa con Henry Lizana Samamé, José Zapata Picón, Lucas Quiliche Durand y Gilmer Montenegro».

Imagen: La Mula

No son los únicos sindicados como los que están detrás del tráfico de terrenos en la zona. El propio Gobierno Regional de Ucayali ha sido apuntado con el dedo por la Federación de Comunidades Nativas del Ucayali y Afluentes (Feconau). Así se lo hizo saber a The Guardian y en un comunicado:

«Este hecho una vez más pone en evidencia el conflicto latente por tráfico de tierras, tala y comercio ilegal de madera, y deforestación indiscriminada, el cual es propiciado desde las esferas del Gobierno Regional de Ucayali y los grandes inversionistas que ingresan a la Amazonía para sembrar grandes extensiones de monocultivo de palma aceitera».

El gobernador regional de Ucayali. Imagen: Sin censura

El gobernador regional de Ucayali es Manuel Gambini Rupay, quien llegó al cargo por el Movimiento Independiente Regional Cambio Ucayalino. En el 2014, fue denunciado ante la Fiscalía por el presunto delito de lavado de activos provenientes del narcotráfico. O sea, brinda más confianza que Joaquín Ramírez administrando gasolineras.

Hablando de fujimoristas: son dos los congresistas de Fuerza Popular los únicos representantes de Ucayali: Glider Ashñahua Huasanga y Carlos Tubino. El primero no ha hecho ningún pronunciamiento público, mientras que el segundo solo tuitea sobre terrorismo. Julio Ramón Ribeyro vive: La piel de un indio no cuesta caro.

[Actualización: 05:14 p.m.]

Luego del post, un furibundo Carlos Tubino hizo público un documento que envió al Ministerio del Interior en el que pedía que se investigue el caso. Denle su táper como premio a la transparencia.