Usurpación agravada, tráfico ilícito de drogas y daddy issues: la detención del hijo de Rodolfo Orellana

El Ministerio Público da cuenta de la detención —en flagrancia— del hijo de Rodolfo Orellana. Foto: Captura/Twitter

En este útero hemos escrito bastante sobre la red de Rodolfo Orellana

En palabras de la fiscal Marita Barreto, es la investigación más grande en la historia del país y también el caso más complejo. 

El abogado tejió una red de estafa y se colocó a la cabeza de esta. Por su telaraña caminaban jueces, notarios, fiscales y policías.

A la fecha se han podido identificar a 482 personas como parte de la red y varias de ellas son funcionarios de hasta tres gobiernos consecutivos (Toledo, García y Humala).

¿En qué consistían sus estafas?

• Desalojaba a terceros de sus propiedades con falsos procesos arbitrales,

• Liquidaba deudas que sus empresas liquidadoras fabricaban,

• Emitía cartas-fianza de Coopex para que empresas constructoras pudieran demostrar solvencia durante la licitación pero desaparecían tras la firma del contrato en perjuicio del Estado.

Por supuesto, la red Orellana es más compleja. También invirtieron en crear medios para tirar barro o exaltar a quienes les convenía, por eso aceitaron relaciones por todos lados e incluso incursionaron en acciones de espionaje.

Su red de impunidad se infiltró en el Poder Judicial y son acusados de lavar millones de soles.

Segunda parte del tuit del Ministerio Público: al parecer Rodrigo Orellana (19) ocupaba este inmueble. Foto: Captura/Twitter

También se sabe que era un negocio familiar

El hijo adoptivo de Orellana (que se llama Churchill, por cierto) es investigado por lavado de dinero por llevarle la administración de la red a través de 9 empresas.

Según la teoría fiscal, Benedicto Jiménez, pieza clave también, intentó ocultar sus ingresos ilícitos con bienes que ponía a nombre de sus hijas.

Ludith Orellana, hermana menor de Rodolfo, ha sido sindicada como la número 2 en toda esta red.

Y ahora pasa al centro Baby Orellana

Un esposado Rodrigo Orellana. Foto: Renzo Salazar/El Comercio

En este útero ya te hemos hablado del mini-me de Rodolfo Orellana, Rodrigo, cuando agredió a un grupo de periodistas durante el traslado de su padre a Piedras Gordas.

Bueno, el tiny toon en cuestión ha sido detenido —en flagrancia— dentro de una de las casas incautadas a su padre con plantas y bolsas de marihuana (y también su toque de cocaína). También le encontraron balanzas e instrumental de laboratorio químico.

Suficiente para llevárselo esposado y acusarlo de los delitos de 1) usurpación agravada y 2) tráfico ilícito de drogas.

Los caminos de la vida no son lo que yo esperaba, no son lo que yo creía, no son lo que imaginaba. Foto: Capturas

Tomémonos unos minutos para entender bien lo que pasó:

1. Rodrigo Orellana presuntamente traficaba drogas.
2. En una casa que la fiscalía ya le había incautado a su padre.

De hecho, Rodrigo entró a la casa en marzo de este año rompiendo la chapa y luego cambiándola. No solo eso, en su ficha de Reniec figura esta casa.

Entonces: ¿quería ser atrapado o es muy malo planeando? ¿Es una mente maestra del crimen o más bien un Calígula de la generación Z?

¿O quizás está planeando un tributo a esta escena? Foto: Hard Knock Life /YouTube

Esas son preguntas para otro día.