Te explicamos al toque cuál es el chongazo de la universidad Inca Garcilaso de la Vega
Diego Pereira
I'm back, bitches » @algunpereira » diego@utero.peEmpezaba el año y te contábamos que la universidad Inca Garcilaso de la Vega (UIGV) estaba en riesgo de no recibir licenciamiento de la Sunedu y eventualmente ser cerrada.
Un resumen de las razones
Este fue el diagnóstico de la Sunedu:
- Bajísimas condiciones básicas de calidad educativa,
- Cero transparencia administrativa y
- No se garantiza la sostenibilidad financiera: perdieron S/18 millones en 3 años.
Y ahora hay más detalles sobre ese último punto
La República cubrió la protesta de empleados, extrabajadores y estudiantes que denunciaban el despido masivo de más de 300 personas (entre administrativos y obreros, contratados y nombrados):
Ellos han recibido documentos en los que se les informa de un cese colectivo y se hace referencia a que la universidad “ha entrado a un proceso de reorganización administrativa y financiera producto de la aplicación de la nueva Ley Universitaria”.
Este es el comunicado que emitió la UIGV para que todos estemos «correctamente informados»:
Todo ese floro se resume en una sola idea:
La Ley Universitaria afectó los ingresos de la UIGV y los despidos son parte de su Plan de Adecuación: acciones y plazos que se compromete a seguir para poder ser licenciada.
Y sobre eso, también hay más información.
La crisis financiera
En un informe de Semana Económica pueden encontrar más detalles sobre el plan de la UIGV para salvarse, que no es solo despedir a un rehuevo de gente sino también liberar locales para alquilarlos.
Pero, ¿por qué están tan hasta las huevas?
Lo primero es que tras la promulgación de la Ley Universitaria, la UIGV ya no pudo lucrar como antes: ya no podían ofrecer cursos 100% a distancia, cursos de actualización ni dictar tres ciclos al año.
¿Qué tanto dependían de esos ingresos? Bueno, perdieron más de la mitad de su alumnado y resulta que donde más se tiraban la plata era en la planilla. Pero no pagándole a la gente que están despidiendo.
Los sueldazos
Durante años —años de años— se ha hablado de los desproporcionados sueldos del rector de la UIGV y su círculo de amigos el resto de autoridades.
La versión de la UIGV es que dicho sueldo no es real, sino que la universidad realizó una serie de pagos adeudados al rector y que se hizo una (01) sola vez.
Como subraya Paolo Benza en este hilo en Twitter, la posición de la UIGV es irrefutable porque el proceso en el que se hizo la acusación terminó siendo archivado (por temas formales, no por absolución).
Por supuesto, la suerte de la UIGV en los tribunales no acaba ahí. En el 2014, la Comisión de Educación del Congreso concluyó que Cervantes y su mancha se habían pagado S/215 millones en nueve años y que se habían cometido hasta seis (06) delitos.
Pero el informe fue declarado nulo por el juez Ricardo Chang Recuay, exalumno de la UIGV y detenido preliminarmente por el caso de los Cuellos Blancos.
En esta última captura —que viene de una entrevista de inicios de junio— Cervantes Liñán confirma que puede «abrir, cerrar cuentas y retirar abonos» porque «así lo otorgó la asamblea».
Para acabar, solo queremos resaltar que aquí la UIGV está intentando solucionar una de las varias observaciones que le ha hecho la Sunedu.
¿Y las demás?