¿Por qué resaltar que el autor del proyecto de Unión Civil es gay si esto ya lo sabíamos hace seis meses?
Andy Livise
Pienso, luego me achoro. @ElcholacoPrimicia: Darth Vader confiesa que es padre de Luke Skywalker, Harry Potter gana la batalla de Hogwarts, Jon Snow resucita.
El congresista Alberto de Belaunde ofreció una entrevista en RPP para detallar los pormenores de su propuesta de Unión Civil entre personas del mismo sexo, y en esta, reafirmó su orientación sexual. Emocionados por haber encontrado al Carlos Bruce de la nueva generación, algunos colegas levantaron sus notas así:
Todo bien si no fuese porque su primicia llegó con seis meses de tardanza, el parlamentario Alberto de Belaunde ya había dado a conocer su orientación sexual hace un bueeeen rato en una entrevista para La Mula:
— Mi pregunta era si tú presentarías el matrimonio igualitario (como propuesta).
— Sí, pero, en primer lugar, lo que creo que tenemos que conseguir hoy es la unión civil porque no veo que exista el apoyo político suficiente como para lograr aprobar el matrimonio igualitario.
— ¿Eres abiertamente gay?
— Sí.
La «primicia» de RPP fue tomada con humor por el congresista.
El refrito sirvió, sin embargo, para recordar algunas pautas que eviten notas que alimenten la discriminación, como lo escribe Giovanni Romero, ex director del Mhol:
«No sé qué me sorprende más: que aún haya coleguitas que se sorprendan de que Alberto de Belaunde sea gay, a pesar de que lo declaró abiertamente en la campaña, o que informen su sorpresa diciendo que «confesó» ser gay, como si se tratara de un pecado o un delito… La homosexualidad se declara, se asume, no se confiesa».
El Perú está en los comentarios
Como era previsible, las voces más sabias de nuestra Interné salieron para reafirmar su masculinidad, su amor por la familia y su lucha por la supervivencia de la especie humana.
Por ahora tenemos que esperar que Mr. President PPK termine su plato de chancho al palo en Mistura para conocer su opinión sobre esta propuesta, aunque formó parte de su plan de gobierno. Prepárense que el «debate» ya empieza, y los profamilia lo saben: