No una, sino varias veces en las que la Policía fue acusada de negligente ante una denuncia de una mujer
Andy Livise
Pienso, luego me achoro. @ElcholacoLa historia de las negligencias en las comisarías cuando alguien acude a denunciar una desaparición, un abuso o un intento de feminicidio ya es conocida de memoria:
- La Policía se inventa alguna excusa para hacer nada. Algunas veces más crueles («se ha ido con otro hombre»), otras veces más burocráticas («no tenemos personal»).
- Hallan el cuerpo de la mujer, asesinada, desmembrada, enterrada, después de días, meses o años. Da igual.
- El Ministerio del Interior se lava la cara: remueve a los policías, los sanciona, ofrece disculpas públicas. En un mes o dos, la historia se repite.
Solsiret (2016-2020)
Hubo hasta disculpas públicas del ministro del Interior. Del actual (Carlos Morán) y del que se fue (Carlos Basombrío). Tres años antes, cuando los padres de Sol intentaron denunciar la desaparición, el agente Dante Pastor (hoy removido, según la ministra de la Mujer) impidió sentar la denuncia bajo la excusa de que ella «se fue con otro» porque estaba con «la cabeza caliente».
Una niña de 8 años (enero, 2020)
Luego de saber que su hija de ocho años había sido violada por su primo de 13, la madre fue a denunciarlo a una comisaría de Comas. La Policía se negó a aceptarla y argumentó que la niña estaba menstruando. El examen del médico legista demostró lo contrario y confirmó el abuso. La teniente Angelita Vega Yatance y el suboficial Carlos Cervera Pineda fueron removidos. Otra vez, una respuesta reactiva y ninguna preventiva (para evitar que vuelva a suceder).
Jessica Tejada (diciembre, 2019)
La Policía de El Agustino tardó 40 minutos en llegar a la casa donde fue asesinada Jessica Tejada y sus tres hijos, una casa que estaba solo a una cuadra. Los vecinos fueron a alertar a la Policía apenas escucharon los gritos de Jessica, antes de que el asesino (Juan Huaripata) incendiara el lugar. En este caso hubo hasta la detención preliminar de los policías. No faltaron las disculpas públicas de la ministra de la Mujer y un indolente «estoy en pleno momento de Navidad» de una exministra de Justicia.
Gisella Ríos (diciembre, 2019)
Cuando Gisella Ríos Alfaro fue asesinada de tres balazos en la cabeza por su marido (Edward Ramos Chuquimantari) en Junín, la madre de Gisella contó que su hija había intentado denunciar anteriormente al asesino, pero no le hicieron caso: «Este año me contó ‘mamá, mi esposo me amenaza con matarme. He ido a la Policía y no me hacen caso’. (…) ‘Me dijeron eres una ociosa, no has cocinado, no has lavado, por eso tu marido te ha pegado’”.
Elisa Vilcañaupa (junio, 2019)
A Elisa Vilcañaupa Chaca le dijeron que «se reconcilie con su marido» (Eraclio Oré Sánchez) luego de que ella llegó hasta la comisaría de Chilca (Huancayo, Junín) para intentar denunciarlo porque la quiso estrangular. Así lo contó Elisa una semana después, cuando su pareja, en venganza por el intento de denuncia, envenenó a sus tres hijos y luego se suicidó.
Una adolescente de 13 años (enero, 2018)
El 5 de enero del 2018, la hija de 13 años de Edgar Romero desapareció. Cuando llegó a la jefatura de Villa El Salvador, dijo que los agentes no quisieron aceptar la denuncia: le dijeron que debía esperar 24 horas, a pesar de que la Ley Brunito (vigente desde 2011) permite que se haga una denuncia por desaparición de un niño, adolescente, adulto mayor o persona con discapacidad sin que pase 24 horas. Un mes después, la adolescente seguía desaparecida.
Marisol Laura (setiembre, 2016)
Marisol Laura fue atacada con un cuchillo por su ex conviviente Richard Cotrado Vega. Contó que lo que desató la ira del exconviviente fue un reclamo por la pensión de sus hijos. Al llegar herida a la comisaría de Gonzales Vigil (Tacna), la Policía se negó a atenderla porque no había ninguna agente femenina. Agobiada por su estado de salud, por el frío que pasaban sus hijos y por el tiempo de espera (aseguró que casi dos horas), la mujer se fue.
La lista de mujeres y familiares que denuncian la negligencia de la Policía es larga. Ni siquiera cuando aceptan tu denuncia hay garantía de que no te pasará nada:
La mayoría de mujeres que murió por feminicidio entre 2012-2015 denunció ser víctima de violencia antes de ser asesinada.
Ninguna disculpa repara, ninguna disculpa cambia la realidad.
– Necesitamos el Protocolo de Mujeres Desaparecidas.
– Necesitamos el Portal de Personas Desaparecidas.
– Necesitamos que las empresas de telefonía que no respondan inmediatamente sean sancionadas.
Una #LeySolsiret.— Kathe Soto (@kateSotoT) February 20, 2020
¿Y si en lugar de unas disculpas, la Policía empieza a capacitar seriamente con enfoque de género a sus agentes? ¿O también piensan que es «ideología de género»?