Murió Pinochet
No crean en las noticias. No fue que le fallara el corazón, porque Pinochet no tenía corazón. Seguro algún demonio le terminó de cobrar una vieja deuda. Quizás ésta:
(vía reaño)
Ahora, sólo falta Fidel.
(Hey, hoy es el día de los derechos humanos. La justicia poética existe.)