«Lucas hizo una película basada en lo que él admiraba de niño, en las películas seriales, en el ciné de matiné»
Escribe Roberto Bustamante
Yo no sé, la verdad, qué esperaban muchos. Quizá una película con diálogos a lo Wes Anderson, con planos simétricos. Otros apelan a una nostalgia extraña, porque comparan este nuevo episodio (The Force Awakens) con Star Wars (1977), cuando a mi gusto, esta corrige varios puntos de la primera. Para empezar, tienes a una actriz mucho más que competente como la heroína (heroína y no héroe, lo cual es bastante y mucho). Ridley actúa hoy mucho mejor que Hamill en lo que luego se llamó Episodio 4. Me gustaron también Boyega y Oscar Isaac. Los diálogos de Kasdan, como bien lo escribió Bedoya, son divertidos, cortos, ingeniosos. Las actuaciones son buenas, la de Ford, la de Fischer.
Y sí, es Hollywood. Es Disney. Es negocio. Es vender muñequitos. Y ahora muchos están como locos buscando sea como sea la figura de acción de Rey. Y quieren recrear en su sala las escenas de peleas entre los protagonistas. Y querrán luego imaginarse y llenar todos los vacíos argumentales y cabos sueltos que deja la película (¿acaso se olvidaron antes de la precuela, que muchos tratábamos de imaginar a qué se refería Kenobi con «las guerras clónicas»?). Yo también comencé a amar el universo Star Wars alucinando mis historias a través de las figuras de acción.
Y es una película hecha con cariño. Tanto de Abrams, como de los viejos actores que repiten el mismo papel que, se nota a leguas, la están pasando bien. No sé dónde leí, pero sí, cuando se reencuentran Leia y Han, se siente natural. Son dos adultos mayores que se vuelven a ver y que recuerdan su pasado con cariño, amor y amistad. No hay momento cursi alguno.
Abrams además se nutre de otras fuentes. Lucas hizo una película basada en lo que él admiraba de niño, en las películas seriales, en el ciné de matiné. Abrams se nutre directamente de las películas de Lucas, de Spielberg, las películas que vio de niño.
Y antes que empiecen con los ad hominem, no, no estoy escribiendo de fanático. A mi no me gustó la precuela. Cada vez que la veo, hay escenas que me parecen mal hechas, los efectos especiales envejecen rápidamente, hay momentos en los cuáles se ve la costura del CGI pero ya muy rochosamente. Tampoco me pegué a los dibujos de Clone Wars. Pero sí me está gustando, con todos sus defectos, Star Wars Rebels y me ha gustado The Force Awakens. Mucho. Entiendo lo que quieren hacer y hay una nueva generación que va a amar la película y va a amar a los héroes y despreciar a los villanos. La película es para ellos.
A nosotros nos queda la nostalgia. Pero que la nostalgia no termine en un conservadurismo enmascarado de postmodernidad. Disney apostó por lo seguro y no por los excesos de la precuela. Como dije al inicio, varios se quejan que la historia es la misma que siempre. Sí pues, la senda de la heroína. La heroína de las mil máscaras.