La piratería no es robo, es piratería
Vía País de Eme
Luego de lo que le pasó a Spencer, siempre sale el comentarista que se quiere hacer el listo y te saca en cara tu defensa de la piratería. Me encanta la gente que tiene las cosas claras luego de la aparición de Internet, es decir, en medio de uno de los procesos de transformación de mentalidades más enormes de la historias de la humanidad. Me encantaría tener tantas certezas. Pero yo sí creo, como dicen en Choledad Privada, que hay que ser bien conchudo para vender o comprar la copia pirata de La Teta Asustada «y luego maletear al cine peruano y exigir mejores producciones».
«El problema es que cada día es más fácil trasgredir derechos [de autor], no solo al copiar contenidos, sino al crear estos mash-ups», dice Eduardo Villanueva. Los mash-ups son esas mezclas de todo para crear un producto nuevo. Aquí tienen un ejemplo: Trhu You
, que, según Esquizopedia, «toma decenas de videos de YouTube, los edita, los mezcla y crea canciones increíblemente alucinantes y sorprendentes. Esto es arte con la tijera digital. Músicos que han subido sus creaciones a YouTube son revisitados, cortados, pegados, dados vuelta, detenidos y mezclados».
¿Esto es piratería o es arte? ¿O las dos cosas? ¿Y los que hicieron el material original? ¿Quién les pidió permiso? ¿Quién les pagó? ¿Esto es legal? La legalidad, como siempre, está un paso más atrás de la tecnología. «¿Sabemos qué cosas son legales e ilegales en nuestro país? ¿Es legal silbar una canción conocida en un video? ¿Copiar un poema? ¿Hacer un libro hablado para ciegos?», se pregunta litio después de ver este vídeo:
NO SOY DELINCUENTE from NO SOY DELINCUENTE on Vimeo.
¿Qué hacer contra la piratería? NADA, se responde Enrique Dans, uno de los blogueros más reputados de habla hispana. Y agrega:
La difusión no perjudica a los artistas cuando se asume que el modelo de cobrar por copia ha desaparecido. No se puede aspirar a cobrar por algo, generar una copia, que ya no cuesta nada. Producir música no es gratis, copiarla sí. Por tanto, hay que generar valor de otra manera. Proteger el negocio de las copias es absurdo.
Algo de eso entendieron, a su estilo, los Monty Python cuando inauguraron su canal en YouTube:
La sociedad industrial que generó los derechos de autor ha muerto. Lo que no terminamos de entender qué es lo que ha nacido.
Por cierto, este post, como de costumbre, es puro copy/paste.
Blog: Cut and paste (el morsa)
Blog: Economía pirateril (mundo chanfainita)
Blog: La hipocresía de Lars Ulrich (ALT 1040)
Blog: FairShare: para evitar que se roben tus contenidos en la web (Microsiervos)
Blog: La piratería es ecológica (chistes geek)