Estas son las 5 basombriadas del ministro con la autoestima más alta del gobierno de PPK
Andy Livise
Pienso, luego me achoro. @ElcholacoAntes de empezar a leer este urgentísimo post, debes darle click a nuestro soundtrack compuesto por Johan Sebastian Maestropiero.
El ministro del Interior, Carlos Basombrío, es el que tiene la más alta autoestima del gobierno del presidente PPK. La prueba es esta entrevista en La República:
Basombrío juuura que se quedará hasta fin de año. Cuando le preguntan en cuánto tiempo reducirá las cifras de revictimización (personas que han sido víctimas de un delito en más de una ocasión) al 24%, como lo promete, Basombrío contesta:
Basombrío: Tiene que ser progresivo. Espero llegar antes de los dos años, sino llegamos y no avanzamos y las cifras no me ayudan… ahí está mi cargo.
La República: ¿Antes de los dos años?
CB: Si las cifras no ayudan y a final de año han subido todas, me voy. Ustedes me van a evaluar.
Ayudemos al público, entonces, a evaluar al ministro con estas 4 basombriadas que vienen marcando su gestión:
1. El estafón escuadrón de la muerte
Ocurrió al iniciar su gestión. Era agosto del 2016, y luego de un reportaje que denunciaba la existencia de un escuadrón de la muerte que asesinaba delincuentes, el ministro Basombrío salió a corroborar la información, aunque luego dijo que no. Toditos creímos en la historia. Menos Gustavo Gorriti. Rebobinemos la historia para entender por qué.
- 08 de agosto. Basombrío asegura: «Hay indicios muy fuertes de un escuadrón de la muerte».
- 16 de agosto. Basombrío reafirma: «Los responsables están claramente identificados».
- 26 de agosto. Filtran un video en el cual se escucha a los miembros de la Subunidad de Acciones Tácticas (SUAT) reclamándole al ministro por haber adelantado opinión sin haber escuchado su versión.
- 27 de agosto. El reclamo causa efectos y Basombrío declara:»No hubo escuadrón de la muerte, pero sí un grupo irregular”.
- 17 de setiembre. Los familiares de los policías implicados anuncian denuncias contra Basombrío por «difamación».
Finalmente, todo quedó en nada. Gorriti fue más.
2. El salado culpable del incendio en Larcomar
Todos lamentaban el incendio en Larcomar que provocó la muerte de cuatro personas. Algunos pedían la cabeza del cine UVK y de Larcomar por las negligencias que habrían cometido en cuanto a la seguridad del lugar. Dos semanas después (para buena suerte del cine y el centro comercial), el Ministerio del Interior difundió un comunicado y un video en los que acusaban a un hombre de ser el principal sospechoso de haber causado el incendio.
¿Las pruebas?
Haber caminado por la zona sin dar ninguna muestra de temor o empatía por las víctimas aún no conocidas del siniestro. O sea, por ser un salao y un misántropo. Añadieron que el hombre estaba como no-habido.
El inculpado apareció al día siguiente con nombre y apellido (Luis Raúl Salazar Belit) en todos los medios para aclarar que él solo era un trabajador que se encontraba pintando unas mesas. El «no-habido» hasta tenía una cuenta de Facebook en el que cualquiera podía contactarlo. Meh.
El hombre jamás fue hallado responsable. En síntesis, la denuncia tuvo más humo que el del incendio.
3. Recompensas para capturar a delincuentes que estaban en sus casas
Al iniciar el gobierno se anunció que para capturar a los delincuentes, reforzarían el sistema de recompensas a cambio de sus cabezas. Un golazo fue el incluir en esta lista de los más buscados a potenciales feminicidas como Ronny García (agresor de Lady Gillén) y a Carlos Feijoo Mogollón (agresor Milagros Rumiche).
Recordemos cómo los capturaron:
- El 18 de diciembre del 2016, ofrecieron por Ronny García 15 mil soles.
- El 29 de diciembre del 2016, fue capturado en un estacionamiento cerca a su casa, en el Rímac.
- El 30 de agosto del 2016, por Carlos Feijoo Mogollón también ofrecían 15 mil soles.
- El 30 de noviembre, fue capturado en su casa de Tumbes.
La pregunta, que hasta un policía escolar se hace, es:
¿No sería mejor empezar por buscar a los requisitoriados en sus propias casas o en sus barrios antes de pagar tanto?
4. Disparo perdigones, pero no me hago cargo
Durante la primera protesta de los vecinos de Puente Piedra contra el peaje de Rutas de Lima, un fotógrafo de Perú 21 fue herido por las esquirlas producto de un perdigón. Marco ‘Atoq’ Ramón fue herido cerca a un ojo y su situación se complicó al punto de tener que viajar de urgencia a Estados Unidos para ser operado.
Los familiares y amigos tuvieron que realizar una serie de actividades para cubrir los gastos del tratamiento médico aquí y en Estados Unidos. Según denunciaron, ni el medio ni las autoridades responsables de la Policía se hicieron cargo. Erick Ramírez, un estudiante que también se encontraba en la protesta, recibió un perdigón (como si fuese una costumbre) cerca al ojo. También quedó en grave estado y tampoco recibió ningún apoyo del Ministerio del Interior.
Basombrío solo lamentó el hecho. Bueno, al menos hubo un apoyo moral (?).
Hecho lamentable y obviamente no intencional, pero igual se hace las investigaciones del caso https://t.co/TPFM5HIH9s
— Carlos Basombrio (@CarlosBasombrio) 11 de enero de 2017
5. Senderistas y detenidos en Puente Piedra
La última basombriada fue el haber detenido a 55 personas en la segunda protesta contra el peaje de Puente Piedra. Levantó más gente que cobrador de combi. Hubiese sido una medalla de no ser porque muchos de ellos fueron detenidos irregularmente. La congresista Indira Huilca contó algo de eso:
«El viernes, la Fiscalía pidió prisión preventiva para los 55 detenidos. Esta solicitud, sin embargo, solo se ha sustentado de forma individual para alrededor de 25 de los detenidos. A otros 27 no se les hace ninguna imputación de manera formal, se les ha dicho que en la audiencia en la que se definirá su situación recién se les indicará oralmente de qué se les acusa».
Lo más a l u c i n a n t e era que entre los detenidos hubo madres de familia y ancianos. Este es el caso de Ana María Olivos, cuyo caso contó el abogado Wilfredo Ardito:
«El día de la protesta, ella salió de su casa a buscar al segundo de sus hijos y, cuando vio que la policía detenía a un muchacho, creyó que era él. Comenzó a gritar: «¡Suéltenlo, abusivos!» y entonces los policías fueron contra ella y después de arrojarla al suelo la detuvieron».
El Poder Judicial, como era obvio, determinó la liberación de varios de ellos, entre quienes se encontraba Lía Valderrema. Ella fue retenida en vivo por opinar sobre el conflicto a nivel nacional. ¡Ah! Y según algunos trolls, el haber sido funcionaria de la gestión de Susana Villarán.
El ministro, lejos de reconocer su basombriada, indicó que se encontraba atado de manos (ah, como Castañeda) y que estaba completamente seguro (sin pruebas) de que la Policía les avisó a esas personas por qué estaban siendo detenidas. Cuando la periodista respondió que, entonces, el juez estaba actuando mal, Basombrío dijo que no quería generar un conflicto de poderes.
Días antes, el ministro aseguró (con buenas intenciones, eh) que Sendero Luminoso estaba infiltrado en la protesta de los vecinos de Puente Piedra:
«Hay evidencias nuevas de algunos infiltrados que tienen trayectoria senderista, y están identificados con nombre y apellido».
¡Ah, exactamente como los policías del escuadrón de la muerte! Feliz año, entonces, ministro. Lo vemos en el 2018 ¿No?