El director de un colegio carga graves acusaciones por abuso pero el Ministerio de Educación se lava las manos
Andy Livise
Pienso, luego me achoro. @ElcholacoSobre Alfredo Draxl (el personaje del círculo rojo que encabeza esta nota) existen escabrosos detalles de los abusos que presuntamente cometió años atrás. Su principal denunciante es el periodista José Enrique Escardó, quien ha vuelto a recordar los sucesos que se desarrollaron cuando pertenecían al Sodalicio, el grupo cristiano de laicos y sacerdotes que arrastra acusaciones de abusos sexuales, físicos y psicológicos.
Me hizo dormir en la escalera de la casa por un mes. Una escalera antigua, de mármol o algo así. Sin colchoneta ni nada que me proteja del frío. Podía usar una frazada para cubrirme. Era un castigo típico de la escuela de formadores de Figari.
— . (@JEESxorcismo) 21 de marzo de 2019
Me puso una cuchilla en el cuello. Me tomó desprevenido. Estábamos estudiando en la biblioteca. Vino por detrás. «Aprieta» me gritó. No lo hice. «Maricón, aprieta». Igual, no apreté. Obligó a otro. Me paró, me gritó y, con cada sílaba, me clavaba la cuchilla en pecho y abdomen.
— . (@JEESxorcismo) 21 de marzo de 2019
Draxl ha aceptado los abusos. Yo he sido declarado como una de las 66 víctimas oficiales de abusos en el informe oficial presentado por el propio Sodalicio. Esto no es ficción, no es exageración. Esto pasó y su excomunidad lo ha aceptado públicamente.
— . (@JEESxorcismo) 21 de marzo de 2019
Los hechos que Escardó contó en Twitter ocurrieron cuando permaneció en una comunidad del Sodalicio, entre noviembre y diciembre de 1987, según escribió en su blog. El miércoles último, Draxl reconoció varios de los episodios ante la comisión investigadora de abusos sexuales contra menores de edad en organizaciones del Congreso, la cual es dirigida por Alberto de Belaúnde, aunque les dio una connotación de «disciplina».
«Eso de dormir en una escalera, quitándole el colchón a las tablas, yo lo hice, pero no era necesariamente un castigo, sino ligado a una experiencia que tenía que tener para superar la incomodidad. (…) Era un tema que uno lo concebía como una preparación, no como un castigo (…) (El tema de la navaja en el cuello) sí ocurrió, pero no fue una cuestión de amenaza. Fue casual. Estábamos en juegos. Eso duró segundos. No fue una circunstancia de amenaza, ni de violencia, era circunstancia de un juego».
La página 28 del informe que el propio Sodalicio publicó en febrero del 2017 recoge un testimonio muy similar al contado por Escardó, aunque sin mencionar ningún nombre. En ese caso, el acusado también calificó los hechos como «acciones lúdicas que hizo para ayudar al aspirante a ser una persona más fuerte», por lo que se concluye que se trató de los posibles maltratos de Draxl a Escardó.
¿Pero por qué se revive esta acusación?
Escardó tuiteó lo que padeció porque descubrió que Alfredo Draxl es el actual director del colegio Liceo Naval Almirante Guise (San Borja), como lo comprueba este documento firmado por el exsodálite.
Este útero corroboró, a través de una llamada telefónica, que Draxl es el director de la institución educativa. Su secretaria de turno respondió que el acusado no podía atendernos porque estaba ocupado:
«Lo que pasa es que el señor Alfredo justo hoy está en reuniones con todo el personal, tiene reuniones a diversas horas. Prácticamente toda la mañana está atendiendo a las diversas áreas. Está dentro del colegio, eso sí, pero está pasando por todas las áreas».
Su presencia en esta institución se confirma porque es integrante del Consejo Directivo de la Asociación de Colegios Particulares Amigos (ADECOPA), en representación del «Liceo Naval Almirante Guise».
Ante la preocupación de tener a tantos escolares a cargo de un acusado de abusos físicos y psicológicos, el Ministerio de Educación sacó cuerpo. Aseguró que «el Minedu no le otorga plazas directivas, docentes ni administrativas» a ese colegio y responsabilizaron a la Marina. Cuando nos comunicamos con el Minedu para pedirles la norma o la ley que los exime de nombrar al director de ese colegio, se comprometieron a enviarnos el dato, pero al cierre de la nota, no lo hicieron.
También llamamos a La Marina, pero señalaron que darán su versión a través de un comunicado de prensa. Mientras tanto, los estudiantes del Liceo Naval Almirante Guise siguen permaneciendo al mando de este acusado e investigado por cometer abusos físicos y psicológicos.
[Actualización, sábado 23 de marzo del 2019]
El Ministerio de Educación informó que la cartera de Defensa (a cargo de La Marina) decidió retirar a Draxl de la dirección del Liceo Naval Almirante Guise.
Si bien el Minedu no le otorga plazas directivas a esta IE, sí ejerce su rol rector de la educación y vela por los derechos y la seguridad de nuestros estudiantes.
— MineduPerú (@MineduPeru) 23 de marzo de 2019