Conoce el Perú primero
Marco Sifuentes
tú lee nomásComo moscas contra el vidrio, todos aún seguimos tratando de encontrarle una explicación a lo que pasó el domingo.
Una explicación posible es que la centro-derecha-democrática nunca encontró el candidato ideal. Para mí siempre fue sorpendente que alguien tan experimentado y zorro como García se la jugara por un desangelado como Castañeda, con el carisma de un apio y rodeado de tránsfugas y pendejeretes. Toledo no fue mejor; con sus errores y atolondramientos de campaña, volvió a demostrar que se encontró con la presidencia de casualidad y que nunca se la mereció. Y PPK, ay, por dónde empezar con PPK…
Al final PPK nunca subió. Su 18.4% lo deja más cerca de Toledo (15.5%) que de Fujimori (23.5%). Digamos que esto casi termina dándole la razón a los que argumentaban que PPK era voto perdido: no tiene voto rural, los sectores populares no lo conocen, es muy gringo. Todos, la verdad, eufemismos para un axioma políticamente incorrecto que algunos analistas repiten en privado y jamás en público: «un blanco no gana elecciones en Perú».
Sí, la raza/clase/status es un (lamentable) factor, no nos engañemos. Por eso me sorprendió que cierta derecha vuelva a intentar lo mismo. PPK es, ahora, el último heredero del linaje honorable pero políticamente infructuoso de Vargas Llosa, Pérez de Cuéllar y Lourdes Flores. Como si no hubieran aprendido nada. Y, por eso mismo también, no son sorprendentes los exabruptos racistas en las redes sociales. Son igualitos a los ataques contra la comunidad nisei en 1990, cuando Fujimori desplazó a Vargas Llosa. Como si no hubiéramos aprendido nada.
Y aquí es cuando toca ver el «nuevo» mapa del Perú:
(Todos los mapas son elaboración del gran Francisco Javier Rodríguez a.k.a @fjsistemas con información de la ONPE)
El mapa es una cachetada. Un pinchazo en la burbuja. Lima versus el resto del Perú (salvo Loreto (ya viene la explicación)). ¿Les sorprende? No debería.
Vuelvo a poner el mapa del 2006:
Nuevamente: Lima es una isla y, a pesar todo el discursete del Perú avanza, Humala repite su votación en casi todo el Perú. Salvo Ica, que se suma al voto «anti» luego del abandono del terremoto. Keiko ocupa el lugar de Alan en el norte del Perú (salvo en Pasco, gracias al voto duro fujimorista de Oxapampa), como si el fujimorismo ocupara el vacío que ha dejado el aprismo. ¿Cuánto ha avanzado el Perú?
Regresemos al 2011 y veamos un mapa aún más fascinante. Votación por distritos (en blanco están los no contabilizados aún):
Como verán, hay unas evidentes continuidades territoriales en el voto (las dejo allí para que los expertos las interpreten). Y sí, todas son continuidades o humalistas o fujimoristas o (uy) toledistas.
Sólo quiero destacar algunas votaciones puntuales en las zonas donde ocurrieron los conflictos sociales más emblemáticos de este gobierno:
Provincia de Bagua (conflicto desatado por la «ley de la selva» de Alan): Humala, 49.41%
Provincia de Islay (conflicto desatado por el proyecto minero Tía María): Humala, 57.52%
Provincia de La Convención (conflicto desatado por el gas de Camisea): Humala, 68.58%
¿Ya encontraron un patrón? Como dijo Carlos Meléndez el domingo, esta es una victoria del Perro del Hortelano, de esos ciudadanos de segunda categoría a los que García se refirió despectivamente. La prensa adicta a las mineras y a este régimen (son lo mismo) se esforzó durante años en culpar a Patria Roja (primero) y Humala (después) de todos los conflictos. Esa prensa sólo colaboró con la autocomplacencia y autoengaño de la burbujita limeña que acaba de reventar.
Lo siento, coleguitas, la cosa era al revés de como la pintaban: los conflictos no eran culpa de Humala. Humala es culpa de los conflictos.
Y hablando de la burbuja,¿ya vieron la votación de PPK en el territorio nacional? Si fuerzan la vista podrán ver algunos puntitos celestes por allí.
Ok, es hora de un zoom burbujil:
La burbuja era incluso más pequeña de lo que sospechábamos. Sus límites son, por el norte, los pujantes San Martín de Porres y Los Olivos y, por el sur, los tradicionales Chorrillos, Surco y La Molina. Es decir, la Lima que mira al mar y que no mira adentro votó por PPK.
Fujimori se la lleva en varios distritos como Cieneguilla y Ate, pero Humala tiene un bastión en Lima Norte, incluyendo el distrito más poblado del país: San Juan de Lurigancho. Es como una especie cinturón antisistema el que rodea a la Lima-que-avanza.
Retrocedamos un poquito, al año pasado. Este es el mapa, también elaborado por el buen @fjsistemas, de la votación provincial en las elecciones municipales:
¿Estás pensando lo mismo que yo, Cerebro? Sí, casi casi una coincidencia exacta. Los distritos que votaron por Lourdes, votaron por PPK. Los que votaron por Susana, se fueron a Keiko o Humala. Este mapa tiene degradés de colores así que, si se fijan bien, incluso en los distritos que contradictoriamente votaron por PPK y por Susana (San Martín y Los Olivos, por ejemplo), la tía regia ganó con las justas. En los demás casos la correlación votante de Susana – votante de Humala es fuerte.
Esto vuelve a romper el mito de que la «chibolada A/B» (cola de chancho, como diría Aldo) que hizo ganar a Susana es la misma que convirtió en fenómeno a PPK. Sus votantes no suelen coincidir. De hecho, ya Roberto Bustamante ha explicado que los resultados revelan que el verdadero «candidato de los jóvenes» fue Ollanta Humala. PPK fue el candidato de los jóvenes que tienen tiempo para andar en Facebook, que es otra cosa.
Pero hay más evidencias de cómo en el Perú mientras más cambian las cosas más igualitas se quedan:
Según datos de Fernando Tuesta en su libro «Pobreza Urbana y Cambios Electorales», desde 1978, el PPC (uséase, la derecha) siempre obtiene su votación más alta en San Isidro, con porcentajes que históricamente oscilaban entre el 32% y el 65%.
¿A que no adivinan dónde fue que PPK obtuvo su votación más alta de toooodo el Perú?
Efectivamente: San Isidro, con 61.54% de votos.
Según datos del mismo libro, desde1978, el Apra obtenía su votación limeña más alta en Lurín.
¿A que no adivinan dónde fue que Keiko obtuvo su votación limeña más alta?
Lurín: 32.44%.
Según los mismos datos de Tuesta, en los 80, la Izquierda Unida ganaba en Independencia o El Agustino, distritos del entonces «Cono Norte» . Esta vez, Humala también se la llevó en esos distritos pero donde obtuvo más votos fue en Carabayllo (29.27%) y SJL, que siguen siendo parte del «eje rojo» de lo que ahora se llama Lima Norte.
Pues parece que la cosa no ha cambiado mucho, entonces, ¿no? Remplazas la Izquierda Unida por el humalismo y listo. Lo mismo. De hecho, ¿recuerdan a Loreto coloreada de verde toledista? ¿Qué es Perú Posible si no la reedición de Acción Popular? En Loreto, recordarán los lectores más viejos, siempre arrasaba Belaunde.
(A ver si los limeños nos vamos dando cuenta de cómo es el Perú -de cómo es nuestra propia ciudad- la próxima vez que apostemos por un candidato).
Entonces, volvamos al inicio. ¿Qué demonios pasó el 10 de abril? ¿Los peruanos no controlamos nuestro destino? ¿Esto tenía que pasar? ¿Es el fatalismo de las estructuras? ¿Somos una tragedia griega? ¿Una maldición chanca? ¿Todo fue culpa de los taquiones?
Todo esto ha pasado antes y volverá a pasar.
Yo no sé. En clase con Martín Tanaka se insinuó si -descartado PPK por la herencia de la cultura política peruana- una buena campaña de Toledo hubiera podido cambiar este mapa. Quizás no. Quizás la votación final se acomodó a lo que siempre fuimos y seguiremos siendo. No sé. Finalmente, como dice @elmorsa, «Cotler was right: la segunda vuelta no fue entre Toledo y PPK, pero será entre Toledollanta y PPKeiko».
(Cotler is always right.)