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La «diversificación productiva» suena aburrida pero es muy paja y el ministro Giuffra la pone en peligro

Ministro Giuffra, sea más ministro de PPK y menos ministro del segundo gobierno de Alan. Imagen: Útero.Pe

Ministro Giuffra, sea más ministro de PPK y menos ministro del segundo gobierno de Alan.
Imagen: Útero.Pe

Ayer el ministro de Producción, Bruno Giuffra, dijo que la diversificación productiva -uno de los pocos logros del gobierno pasado- «la hacen los empresarios» porque el no es amigo del «dirigismo«.

Espera, ¿qué es la diversificación productiva?

Más conocido como el Plan Nacional de Diversificación Productiva (PNDP), impulsado por el exministro de esa misma cartera, Piero Ghezzi en el 2014, la diversificación productiva se basa en generar nuevos motores de crecimiento económico que conduzcan a la diversificación y sofisticación económica.

O sea que todas las regiones del Perú produzcan (aquí hablamos de varias actividades económicas como la agricultura, pesca, ganadería, energía, acuícola, gastronómica, etc.) de manera ordenada y homogénea en volúmenes que incrementen de manera progresiva.

Mucho más fácil aún: si en un día Tacna produce un botón y Tumbes producen 800 metros de tela, el PNDP procurará que Tacna pueda fabricar 800 botones en un día, de modo que no solo se equiparen los niveles de producción sino que con esto se amplía la oferta laboral en todo el país.

El Plan Nacional de Diversificación Productiva es un paso importante para lograr la industrialización.

Los objetivos a largo plazo del PNDP son los siguientes:

  • Lograr tasas de alto crecimiento económico que sean sostenibles.
  • Acentuar la transformación productiva necesaria para transitar hacia el nivel de ingresos medios-altos.
  • Reducir nuestra dependencia de los precios de materias primas.
  • Reducir las brechas regionales de productividad.
  • Aumentar el empleo formal y de calidad, al reducir la informalidad.
  • Generar en los peruanos una visión de largo plazo sobre la necesidad de diversificar.
  • Todo esto es con el apoyo del Estado.

Pero el actual ministro de Producción piensa distinto.

Giuffra no está de acuerdo

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El ministro Giuffra. Imagen: Andina

Para él los que deciden son los empresarios.

“La diversificación productiva la hacen los empresarios. Ese es el punto de partida. La empresa privada es la que escoge y ve sus oportunidades para embarcarse en nuevas líneas de producción. Eso para mí es lo principal”.

“Yo no creo que tengamos una varita mágica para identificar los sectores ganadores y decidir desde las oficinas o con estudios cuáles sectores se van a embarcar en la diversificación”.

Cree que el rol del Estado solo debería ser el de agilizar.

“Sin embargo, asumiendo que se han hecho estudios sobre oportunidades de mercados sobre nueva oferta de productos, eventualmente exportable o para el mercado interno, sí es cierto que hay muchas trabas y dentro de este proceso de darle luz a nuevas oportunidades productivas, el Estado tiene un rol por lo menos para agilizar y permitir que surjan estas nuevas iniciativas. Desde ese enfoque hay buenas oportunidades”.

“El Estado puede crear condiciones favorables, para que el sector privado reconozca esas señales comerciales, financieras”.

“No soy amigo del dirigismo, ni mucho menos. El sector privado tiene que jugar su rol en la cancha. Nosotros nos debemos de limitar a un rol normativo y dejar que las cosas sucedan lo mejor posible”.

Parece que Giuffra no ha entendido

El periodista económico, Luis Davelouis, explicó en su columna de hoy en Perú 21, cuál es el rol del Estado con esta iniciativa y por qué no debería dejarse de lado:

«(…) a través del Plan Nacional de Diversificación Productiva (PNDP) el Estado no escoge ni empresas ni sectores “ganadores”, sino que limpia el camino para que las empresas desarrollen su propia competitividad».

«(…) Ni los centros de innovación productiva y transferencia tecnológica (Cites) ni las mesas ejecutivas de trabajo son “dirigistas”: el Estado solo asesora, pone lo que falta y desmonta barreras. Y es el primer paso antes de saltar a las actividades de alto valor agregado. No lo mate, ministro, es bueno y funciona».

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No es el cantante Marco Antonio Solís, es Davelouis. Imagen: Captura Perú 21

De hecho, el plan ya ha tenido logros importantes

A más de un año de aplicarse el PNDP, el exministro de Producción, Piero Ghezzi, explicó los avances en una entrevista antes de dejar el puesto:

“Hemos estado trabajando con cinco sectores productivos que pueden ser motores de nuestro crecimiento en la próxima década: forestal, acuícola, textil, industrias creativas y gastronómico, además, con el sector transversal logístico”, refirió.
“También estamos creando la red de Cite (Centros de Innovación Productiva y Transferencia Tecnológica), pues al comenzar este Gobierno había tres Cite públicos y al finalizar vamos a dejar más de 30 Cite públicos y diez privados de primer nivel”, manifestó.
“Estamos dejando una política para la construcción e implementación de modernos parques industriales y agresivos programas de innovación e inversión en ciencia y tecnología, entre otros”, puntualizó.
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El exministro de Producción, Piero Ghezzi. Imagen: Andina

Tres personas no creían en el PNDP y ahora sí

Davelouis también le recomienda a Giuffra leer acerca de algunos escépticos que no creían en el Plan y ya cambiaron de parecer.
Gianfranco Castagnola, presidente de Apoyo Consultoría, explica y destaca el funcionamiento de las mesas ejecutivas del PNDP:

«Las mesas ejecutivas son espacios donde funcionarios de distintas entidades del Estado y representantes del sector privado se reúnen para identificar y solucionar las dificultades que traban el desarrollo de una actividad productiva con potencial exportador o generador de abundante empleo formal y de calidad. Se busca desmontar la sobrerregulación y reducir o eliminar trámites largos y engorrosos, así como enfrentar problemas como las limitaciones legales al acceso a financiamiento, barreras paraarancelarias impuestas por otros países, necesidades puntuales de infraestructura pública, etc».

«Las mesas ejecutivas instaladas están siendo exitosas (…) En los últimos 18 meses esta mesa se reunió más de 70 veces y ha logrado notables avances: se aprobaron reglamentos de la ley que estaban pendientes desde hace cuatro años; el tiempo que toma el proceso de registro de plantaciones en tierras privadas se ha reducido de un año a tres días; el permiso de proceso de extracción en estas tierras, que tomaba ocho meses, ha sido eliminado, etc.».

«La ‘selección’ de sectores donde se instalan las mesas pierde relevancia, pues el Estado está haciendo su trabajo de limpiar el camino y es el sector privado el que deberá desarrollar la capacidad de ser competitivo».

Patricia Teullet, columnista de Perú 21 confiesa haber dudado al inicio de la diversificación productiva, pero destaca que ya está logrando cambios importantes:

«(…) sin mayores anuncios ni flashes, el Ministro estaba haciendo lo prometido: olvidar la absurda idea de que Estado y privado son irreconciliables. A partir de allí, sentándose junto a los empresarios, se comenzó a dar atención a lo micro para comerse a pedazos a ese elefante que suele ser la burocracia estatal».

Sin saberlo, el Perú ha vivido, durante meses, un proceso de diversificación e incremento de productividad, acompañando a una reforma del Estado sin amenazas de despidos, ni grandes titulares, ni sesudos e incomprensibles estudios de consultores expertos provistos por organismos internacionales».

Aunque pueda haber pocos aspectos positivos en el gobierno saliente, el economista, Eduardo Morón, resalta la importancia del PNDP y debe decir “asegura que iniciativas como esta deberían continuarse:

«(…) está el silencioso del ministro Piero Ghezzi en el Produce, mostrando cómo el Estado debe y puede trabajar de la mano con el sector privado para destrabar el proceso de crear una economía con motores diversificados. El poder de esta reforma se debe a que es corregir la suma de muchos pequeños errores que nos hacen menos productivos y más informales. El camino a ser un país desarrollado pasa por tener empresas que sean tan productivas como para competir  con cualquiera del exterior».

Así que ministro Giuffra, please, no se baje la diversificación productiva y todo lo que ha logrado.