7 fotos del nuevo método discriminador en Ancón
Marco Sifuentes
tú lee nomásEn el 2013, Juliana Oxenford denunció que los “residentes” de Ancón colocaron dos líneas de boyas, además de vigilantes, a la altura de la entrada a una porción de la playa. El año pasado, fue este blog el que destapó que habían vuelto las boyas discriminadoras. Este año es el turno del colectivo Ciudadanos Luchando Contra el Racismo, encabezado por nuestro Quijote favorito, Wilfredo Ardito.
Ahora, ellos admiten que ya no se trata de una situación generalizada pero…:
Una visita a Ancón nos permitió darnos cuenta cómo la discriminación subsiste. Ya no están presentes las sogas y los vigilantes ya no impiden el ingreso a varias playas como el año pasado, pero en varios lugares sí se mantienen los problemas.
Ya sabemos lo que van a decir: los que no son «residentes» ensucian las playas. Lo malo es que es el único criterio para decidir si alguien es o no cochino, es la posesión de una casa de playa en la zona. Estos señores de verde (y amarillo) lo que hacen es presumir que eres cochino porque la plata sólo te alcanza para visitar la playa y no para vivir en la zona.
Estamos seguros que los vecinos de la zona no se consideran a sí mismo discriminadores pero quisiera recordar lo que escribimos al respecto el año pasado:
Eso no quiere decir que nos encanten las playas sucias. No, pues. No estamos discutiendo ese problema (que tiene soluciones no discriminatorias: presión a las autoridades, multas, instalación de tachos, contratar recicladores en vez de guardianes, etc). Estamos discutiendo algo que no tiene soluciones expeditivas: lo fácil que es, en este país, discriminar sin darse cuenta.
Por cierto, el colectivo destaca que en Playa Hermosa las sogas se han removido. Que siga el ejemplo.