noticias , politica , sociedad Jueves, 6 mayo 2021

Castillo al fin firma un compromiso democrático mientras que la derecha le regala su voto a Keiko

Podrás creer o no en el compromiso que acaba de firmar Pedro Castillo con Verónika Mendoza para respetar la democracia. Pero lo que hay que reconocer es que la candidata de la izquierda democrática ha logrado sacarle un compromiso firmado a Castillo a cambio de su respaldo. En el documento se lee que el candidato se compromete a algunas generalidades:

  • Afrontar la pandemia garantizando la vacunación y la distribución del oxígeno.
  • Reactivar la economía dejando atrás el modelo impuesto por la dictadura fujimorista.
  • Impulsar la lucha anticorrupción y garantizar la igualdad sin discriminación.
Ahora solo falta botar a Cerrón y todos felices y contentos.

Ahora solo falta botar a Cerrón y todos felices y contentos.

Pero el compromiso más importante de Castillo —que se presentó en esa ceremonia— fue uno que suscribió «con el pueblo peruano». En él da su palabra de que cumplirá con diez puntos que lo muestran con el polo blanco:

  • Tocar todas las puertas para conseguir la vacunación del país «sin discriminación».
  • Crear el Ministerio de Ciencia y Tecnología.
  • Convocar a una Asamblea Constituyente para una nueva Carta Magna «dentro del marco jurídico vigente», sin golpes de Estado.
  • Dejar el cargo el 28 de julio del 2026.
  • No interferir en la justicia del país.
  • Respetar la libertad de expresión, los derechos humanos «y a las minorías».
  • Atender a los pueblos indígenas.
  • Luchar contra la delincuencia con la Policía, las rondas campesinas y las FF.AA.
  • Enfrentar la pobreza y el desempleo respetando la propiedad.
  • Fortalecer el Tribunal Constitucional, la Defensoría del Pueblo y los organismos reguladores.

Pero del lado naranja, no hay un compromiso firmado por Keiko. Encima —a diferencia de Mendoza con Castillo— los candidatos que le han dado su voto o apoyo al fujimorismo no le han pedido nada firmado. Aquí las pruebas.

López Aliaga

Porky del Tercer Reich no solo le ha dado su voto públicamente a Keiko, sino que también está haciendo campaña por ella: ha empezado su «Caravana de la Esperanza» para «salvar la democracia en nuestro país». A su nueva lideresa no le ha pedido nada a cambio porque su fobia a Castillo es tal que ya lo nombró su «enemigo a muerte» y no lo quiere ver ni para venderle un pasaje en tren a Machu Picchu:

 «¿Tú conversarías con una persona que quiere llevarte a ser Venezuela o conversarías con una persona que quiere llevarte a ser Cuba? Creo que no, ¿no?».

La única vez en la que el Perú coincidió con Keiko.

La única vez en la que el Perú coincidió con Keiko.

César Acuña

Acuña —lo ha confesado él mismo— ni se ha reunido con Keiko. Dice que no lo ha hecho porque no están buscando ministerios. Le ha regalado su apoyo (y el de Alianza Para el Progreso) al fujimorismo y después recién le ha pedido un compromiso democrático: «Pido públicamente a la señora Keiko Fujimori compromiso serio y nunca más equivocarse».

Bueno, votó por Keiko en 2011, cuando Humala ya estaba con el polo blanco.

Oh, qué sorpresa. El candidato que votó por Keiko en 2011 (cuando Humala ya estaba con el polo blanco) apoyará a Keiko sin nada a cambio. Imagen: Trome

Victoria Nacional

El partido de Forsyth también le donó su voto a Keiko. Ojo: Victoria Nacional, no Forsyth. Él —dice su exjefe de campaña— todavía no ha tomado posición. Bueno, VN también le ha dado su respaldo a Keiko a cambio de nada. Y así lo dicen orgullosos en el comunicado que compartió el camaleón Techito:

«Sin ningún compromiso de por medio —ya que hemos preferido no sentarnos a conversar con ninguna de las dos fuerzas políticas— el CEN de nuestro partido ha tomado la decisión de respaldar la candidatura de la Sra. Keiko Fujimori en esta segunda vuelta».

cabezagapin

Vargas Llosa

El Nobel publicó su apoyo a Keiko y recién después conversó con ella (por llamado de esta). Vargas Llosa le ha pedido como compromiso respetar las libertades, no indultar a Montesinos, no entrometerse en la justicia e irse dentro de cinco años (si ganara). Le ha regalado el indulto a Fujimori. Y la propuesta de compromiso ahí está, más olvidada que su antifujimorismo.

Y sin compromiso firmado.

Y sin compromiso firmado.

Hernando de Soto

Un caso más o menos distinto es el de De Soto. Él dice que votará por Keiko, pero que no le ha dado su apoyo. «No le estoy regalando el voto, quiero cobrárselo alto, pero no con participación y repartija», ha dicho en El Comercio. Y aclara que si Keiko quiere su apoyo, que firme un compromiso:

«Quiero que suscriba los acuerdos de su papá de 1990, 1992, 1993 y, además, los que ella se comprometió en el 2011 y 2016 de incluir al resto de peruanos [a la economía], porque ahora es una cuestión de vida o muerte».

Seamos sinceros: tampoco será muy difícil que Keiko lo convenza.

Seamos sinceros: tampoco será muy difícil que Keiko lo convenza. Imagen: Gestión

El PPC y el Apra

El partido de Alberto Beingolea, el PPC, también ha respaldado gratuitamente a Keiko por su rechazo al «marxismo leninismo» de Perú Libre. Eso sí, en su comunicado dejaron por escrito una lista de pedidos que a nadie le importa esperan que, por favorcito, Keiko los cumpla.

Kuánta sal.

Kuánta sal.

Por su parte el Apra diiice que ha dejado en libertad a sus militantes para votar, pero en todo su comunicado (que sutilmente se titula: «¡Pan con libertad! ¡No al comunismo!») llaman a no votar por Castillo ni por «un modelo que genera hambre, miseria y totalitarismo, con lo cual destruye la democracia y la economía nacional». El compromiso con el fujimorismo, como en los últimos 31 años, es tácito.

Así acabarán.

Así acabarán.

Pero en el fondo ya debes saber por qué nadie le pide a Keiko firmar un compromiso. En 2016 firmó este y sus resultados ya los conoces:

El punto es el más gracioso.

Más falso que su amor a la democracia.

Ahora ya saben con quién se meten.