corrupción , noticias , politica , sociedad Miércoles, 5 junio 2019

Las peores intervenciones del debate sobre la cuestión de confianza [VIDEOS]

Aún no sabemos si ya puedes gastar lo poco que te sobra de tu sueldo en chelas o si el Congreso continuará funcionando. Daniel Salaverry suspendió la discusión sobre la cuestión de confianza (que si hasta ahora no entiendes de qué va, puedes revisar aquí) y hoy a las 9 am retomarán el circo, perdón, el debate. El siguiente recuento llega gracias a la bancada más unida y sólida del Perú.

1. Las previas

El día empezó con la venganza de Salaverry. Con el puñal clavado en la espalda (la comisión de Ética ha recomendado suspenderlo por 120 días), el presidente del Congreso intentó recomponer las comisiones debido a las últimas fugas. Pero 66 abstenciones (entre ellas, las de los fujis) obstruyeron su sueño y el fujimorismo continúa manejando la mayoría de las comisiones, a pesar de que tienen 20 congresistas menos que en un inicio.

Imagen: El Comercio

Imagen original: El Comercio

Minutos antes de empezar la discusión de la cuestión de confianza, Karina Beteta volvió a darle material a @Smartbeteta: “Yo voy a seguir en contra de la paridad. Creo que no se les puede imponer a las mujeres y obligarlas a participar en la vida política».

2. Galarreta tira barro impunemente

Luis Galarreta hará que te sigas preguntando por qué los congresistas merecen mantener su inmunidad parlamentaria. Aseguró que hay una asonada golpista desde hace mucho tiempo (en alusión al cierre del Congreso que el 70% del Perú apoya) y tiró barro contra la ministra de Transportes, María Jara, a quien acusó de ser parte de la presunta organización criminal de la que formaría parte Susana Villarán:

“El presidente tiene 46 denuncias y nos viene a hablar el señor Del Solar de la lucha contra la corrupción: tiene una ministra de Transportes que es de los cuellos verdes, de las chalinas verdes, de la organización criminal, entonces ¿qué confianza nos pide?”.

Basta con googlear para saber que Jara no es ni siquiera mencionada en el caso de los aportes de Odebrecht y OAS a las campañas de Villarán y tampoco es investigada por la Fiscalía. El único caso por el que se le investigó fue por el de las papeletas fantasmas y ella fue excluida. La ministra, por ahora, tendrá que quedarse con las ganas de denunciar a Galarreta por difamación.

3. Una extraña forma de no ser extrema

Esther Saavedra pidió, por favor, no adoptar posiciones extremas porque eso solo «es peor para el país» y «se agudiza la crisis política». Inmediatamente después, empezó a apanar al presidente, a quien dijo que le enseñaría a trabajar como ella:

«Quiero pedirle al presidente de la República… Bueno, no sé si decirle presidente porque no ha sido elegido por un voto popular. Que ha venido arrastrándose a la bancada de Fuerza Popular para vacar a PPK. ¿Entonces con qué moral viene a hablarnos a nosotros?”.

4. ¿Buscar mujeres para política? Uff, qué pereza…

Eloy Narváez es la Beteta de Alianza por el Gran Cambio, o sea los ppkausas. El parlamentario se puso como tu pata macho progre en Facebook cuando le dicen que es machista, pues sostuvo que buscar mujeres para que postulen en las listas congresales era una tarea casi utópica:

«Eso (la paridad) no es realista tampoco, en muchos lugares de nuestro país, en muchos distritos es imposible tener candidatos para poder llevar a cabo una paridad, vamos a forzar las cosas. Eso puede funcionar en algunos espacios con poblaciones grandes, pero en distritos donde tienen 500 o 600 habitantes y se presentan 20 partidos, ¿de dónde sacas 60 mujeres candidatas? Es una propuesta planteada en una mesa de café».

Que alguien le explique que eso es lo que justamente quiere el proyecto de Vizcarra: obligar a que las agrupaciones busquen candidatas para que puedan participar en política y representar a las mujeres.

5. El pastor huelguista

Quien resultó más rojo que congresista de Nuevo Perú fue Julio Rosas, quien se declaró en «huelga democrática» y se retiró del hemiciclo en señal de protesta por el pedido de confianza del gobierno de Vizcarra, al que tildó de «dictador» de un «régimen totalitario».

Ya sabes, si hoy quieres fugar de tu chamba, declárate en «huelga democrática». Claro que si no tienes la misma plata que un pastor evangélico probablemente a ti sí te afecte el descuento. Compra tus sillas de plástico, tu micrófono y un disco de Jesús Adrián Romero y funda tu templo, nomás.

6. Vizcarra convierte a Tubino en laico

En un arranque de herejía, Carlos Tubino dio un infernal discurso para criticar la reforma del gobierno y a la justicia peruana. La metáfora que utilizó para hacerse entender, sin embargo, no creemos que le haya gustado mucho a Cipriani:

«Acá nosotros queremos que se haga justicia, que se hagan las cosas como corresponden en un país civilizado, democrático. No queremos que se acuse a las personas en base a dichos. No estamos en el Tribunal de la Inquisición, en ese tribunal se acusaba a las personas en base a sospechas. Usted caminaba con una bruja, usted es brujo también, usted también va a la hoguera (…) No queremos retroceder al año 1750, la prehistoria del derecho».

La comparación anticlerical de Tubino se puede considerar como otro milagro de Vizcarra, si tienes en cuenta que Tubino fue el mismo que propuso penalizar las ofensas contra la religión.

7. Salgado se cree profe de Harry Potter

Luz Salgado se tomó en serio su chapa de Dolores Umbridge. Durante su intervención, actuó como tu profe de cole y soltaba al aire preguntas u oraciones incompletas para que la galería le respondiera. Fue tal el roche, que Salaverry tuvo que tocar el timbre para poner orden (la escena está al inicio del video de abajo).

Ah, sí. Estábamos olvidando lo más «importante»: su discurso. Se quejó de que todo el mundo critique al Congreso y le pidió al presidente preocuparse por temas más importantes como la inseguridad ciudadana y añadió que «cerrar el Congreso para actuar como Maduro o Chávez, sin Congreso» se le llama «fujimorismo» «dictadura».

8. El que quiere matar a «los choros»

Rogelio Tucto es un congresista del Frente Amplio, aunque toda su intervención te parecerá la de uno de Fuerza Popular. Su participación se basó en decir que había temas más importantes que la cuestión de confianza.

Para demostrar que había mucha inseguridad ciudadana presentó el video del asalto a una familia en el túnel de la Línea Amarilla, pero mintió en la fecha. Aseguró que la familia fue asaltada el lunes a las 10:30 de la noche, pero el hecho en realidad ocurrió hace un mes. Y eso no fue lo peor de su intervención, sino esta propuesta que parece craneada por un fuji:

“Si se trata de proyectos de ley, por ejemplo, podía haber propuesto una cuestión de confianza proponiendo una ley de reforma de la seguridad ciudadana (…) Instaría yo, de verdad, una ley para matar a todos los choros del país».

Y esto solo ha sido el primer día del debate. Seguramente, hoy tendremos el volumen dos de este post. Aún faltan los platos fuertes: Beteta, Becerril y Arimborgo.