denuncia , libertades , noticias , redes sociales , sociedad , videos , violencia Martes, 9 abril 2019

La jueza que sentenció ayer a Pedro Salinas liberó a dos acusados de violar a dos niñas en Piura

Ayer por la tarde, una sala del Poder Judicial de Piura, a cargo de la jueza Judith Cueva Calle, sentenció al periodista e investigador Pedro Salinas a un año de prisión suspendida y al pago de una reparación civil de 80 mil soles a favor del obispo de esa ciudad, el sodálite José Antonio Eguren. ¿La razón? Una columna de opinión.

Pero no es la primera vez que la jueza Cueva Calle se inclina a favor de la sinrazón. La historia es la siguiente

La jueza suele tener una cruz cada vez que va a decidir sobre un caso. Ayer nos pareció verla así. Intervención: Útero.Pe

La jueza suele tener una cruz cada vez que va a decidir sobre un caso. Ayer nos pareció verla así.
Intervención: Útero.Pe

En el 2014…

Con la excusa de prestarle su computadora para que haga sus tareas, Miguel Ángel Córdova, de 39 años de edad, casado y con dos hijos, hizo ingresar a su vivienda a una niña de 14 años que vivía al frente de su casa. Aprovechando que no había nadie más que él y la niña en la vivienda, subió el volumen de la música y la amenazó con un cuchillo para luego abusar sexualmente de ella.

Esta escena se repitió varias veces. El hombre obligaba a su víctima a enviarle mensajes de texto como si tuviesen una relación sentimental. Según lo que declaró la denunciante, el sujeto la amenazaba diciéndole que si no le hacía caso, lo mismo que le hace a ella le haría a su hermana menor. La niña accedió.

Con el paso de los meses, el hombre cavó un hueco que daba a la habitación de la adolescente. Ingresaba al inmueble para seguir abusando de su víctima. Todo esto duró nueve meses hasta que la denunciante le dijo a su mamá lo que le estaba sucediendo con el vecino del frente.

La madre, obviamente, denunció a Miguel Ángel Córdova Saavedra.

Sin embargo, y a pesar de las pruebas, el caso fue archivado en abril del 2017. El abusador alegó que su víctima «se había enamorado de él», usando los mensajes que le obligó a escribir bajo amenazas.

En junio del 2017, cuando tenía prohibido acercarse a su víctima que ahora tenía 17 años, la llevó, amenazándola con una pistola, a un hostal en Piura. En ese lugar no solo la violó sino que la golpeó.

  • Sacó un fólder manila y le pidió que firme un consentimiento para mantener relaciones sexuales con ella. La adolescente se negó. El sujeto, furioso, la lanzó contra el espejo.
  • Luego, nuevamente le pidió que firme. Ella volvió a negarse, y la golpeó y mordió y luego abusó de ella sexualmente.
  • De este maltrato quedó registro en la evaluación médica por la que pasó la adolescente.

Al día siguiente, Miguel Ángel Córdova Saavedra fue capturado. Sin embargo, cuatro días después, y a pesar de todas las pruebas en su contra, un juzgado integrado por tres jueces, entre ellos Judith Cueva Calle, decidió darle libertad restringida al denunciado.

Pero esta no fue la primera vez que Judith Cueva Calle liberaba a un acusado de violación sexual

En el 2016, la misma magistrada junto a otros dos jueces absolvió a Francisco Nima Rosas, un sujeto acusado de haber abusado sexualmente de una niña de 14 años con retardo mental en un caserío de Piura.

El sujeto, de 43 años en ese entonces, era el tío de la niña. Cuando ella se lo dijo a su madre, Francisco Nima Rosas se dio a la fuga. Estuvo un año y tres meses escondiéndose de la justicia en Lima.

  • El médico legista determinó que la víctima sufrió lesiones en sus genitales producto de la violación, con el agravante de que se trataba de una persona con discapacidad.

Un año y tres meses después, capturaron al sospechoso. Pasó 9 meses en prisión preventiva y admitió el delito. A pesar de eso, para sorpresa de todos, un grupo de magistrados entre los que figura Judith Cueva Calle, absolvió al sujeto.

Todo esto lo contó un reportaje de Punto Final de hace casi dos años.

La misma jueza que cree que una niña de 14 años puede «enamorarse» de un sujeto de 39 años y que absuelve del delito de violación sexual a otro acusado de abusar de otra niña con discapacidad, sentenció ayer a Pedro Salinas por «difamar» al cura sodálite José Antonio Eguren.

A la izquierda, José Antonio Eguren. A la derecha, su dios muerto. Imagen: Arzobispado de Piura

A la izquierda, José Antonio Eguren. A la derecha, su dios muerto.
Imagen: Arzobispado de Piura

Judith Cueva Calle castigó al periodista que se cargó años investigando los abusos perpetrados contra niños y adolescentes al interior de una de las organizaciones más poderosas de la iglesia católica en el Perú, el Sodalicio. Y este no solo es un peligroso precedente para la libertad de expresión en nuestro país, sino que pone en riesgo incluso que niños y niñas abusados logren obtener justicia.