noticias , politica , violencia Domingo, 6 enero 2019

Cuando al fin deciden quitarle la colegiatura a Chávarry se revela una mecha que alarga todo

Ya se cumplirá una semana del golpe de Chávarry contra el equipo especial Lava Jato, pero aún se mantiene en el cargo. Las única entidades que pueden mandarlo a su casa son el Congreso (donde el keikismo la hace larga) y el Consejo Nacional de la Magistratura (que está desactivado). Existen dos esperanzas más:

  • El proyecto de ley de Vizcarra que declara en emergencia al Ministerio Público (pero todavía se discute si es constitucional o no).
  • Y la suspensión de la colegiatura de Chávarry por parte del Colegio de Abogados de Lima (CAL).

El último punto es el que acaba de revivir esta mañana, cuando el CAL suspendió su colegiatura por «las presuntas faltas antiéticas que vulneran el Código de Ética del Abogado». Muchos se emocionaron porque creyeron que este sería el fin del fiscal favorito de los fujis, pero todo sigue más enredado que zapatilla de ciempiés.

Imagen: CAL

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1. Sin colegiatura, bai

Mucho se ha discutido sobre si, tras la suspensión de la colegiatura, Chávarry puede seguir siendo fiscal o no. La Ley de Carrera Fiscal (ley 30483) es clara en su artículo cuatro:

«Son requisitos generales para el ingreso y permanencia en la carrera fiscal: (…) 3. Tener título de abogado expedido o revalidado conforme a ley, así como encontrarse hábil en el ejercicio profesional».

¿Y cuáles son los requisitos para ejercer la carrera de abogado en nuestro país?

Estar inscrito en el Colegio de Abogados del Distrito Judicial correspondiente. 

Imagen: CAL

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2. La larga espera

El proceso contra Chávarry se ha desarrollado en el Consejo de Ética del CALempezó en agosto del año pasado. Por esa fecha se prometió que la investigación no tardaría más de dos semanas pero cuatro meses después no había ninguna resolución. La hacían más larga que los keikistas en el Congreso. Recién hoy se conoció la suspensión.

¿Por qué demoró tanto?

Pasa que el Consejo de Ética está compuesto por cinco miembros, de los cuales dos (Andy Carrasco Huamán y Juan Manuel Salazar Rosales) ni siquiera acudieron a votar a pesar del llamado del presidente de esa comisión, Walter Ayala, según informó este a Canal N.

Los tres votos contra Chávarry de azul. Los de naranja no han ido ni a votar, según Ayala. Imagen: CAL

Los tres votos contra Chávarry de azul. Los de naranja no han ido ni a votar, según Ayala. Imagen: CAL

A pesar de ello, había tres votos contra Chávarry. ‘Gonzalit0’ ya había hecho una jugada el 28 de noviembre del 2018: presentó una recusación contra Ayala ante el Tribunal de Honor del CAL porque supuestamente este adelantó opinión. El pedido impediría que Ayala votara. El mismo Ayala, sin embargo, ha asegurado que su voto fue dado antes de la recusación de Chávarry

3. ¿Ya es aplicable la suspensión o no?

La famosa recusación de Chávarry alimentó la demora de la resolución de hoy, pero también ha generado un tira y afloja un tira y afloja de dos grupos dentro del CAL:

  • Por un lado están Walter Ayala, presidente del Consejo de Ética del CAL.
  • Y por otro, Maria Elena Portocarrero (decana del CAL) y Fernando Vidal (presidente del Tribunal de Honor del CAL que evalúa la recusación contra Ayala).

Ayala ha explicado que la suspensión de la colegiatura de Chávarry es de ejecución inmediata, así haya una apelación de por medio, pues en el caso de César Hinostroza fue igual. En oposición, Portocarrero y Vidal han dicho que no, que aún debe resolverse la recusación contra Ayala, que mientras tanto todo sigue en suspenso y que debe respetarse el debido proceso.

Imagen: ´Tv Perú

Vidal y Portocarrero. Imagen: Tv Perú

Estos dos últimos ya habían aparecido en TV Perú el último tres de enero para adelantarse a Ayala y advertir que no podía votar en este caso, a pesar de que este indicó que su voto fue antes de la recusación. Curiosamente, Chávarry coincide con tal interpretación.

Hoy Vidal se ha atrevido a deslizar en canal N que Ayala «actúa para ganar notoriedad o respondiendo a ciertos intereses que podrían haber». La mecha da para largo y parece que, por ahora, todo sigue estando en manos del Congreso, mejor dicho, de los keikistas.