corrupción , denuncia , libertades , noticias , politica , sociedad , violencia Viernes, 8 junio 2018

Ahora que ya todos se olvidaron de Eivy Ágreda, la justicia peruana vuelve a la normalidad, o sea, a la impunidad

Ya todos están en modo mundial y por eso la justicia juega su propio partido. Uno bastante sucio. El Poder Judicial y la Fiscalía han liberado a un feminicida y a un par de violadores sexuales, respectivamente.

Impunidad. Imagen: Útero.Pe

Impunidad.
Imagen: Útero.Pe

Un caso parecido al de Eivy

La muerte de Rosa Mirasol Álvarez Rivera (27) fue terroríficamente similar a la de Eivy Ágreda. Ella sufrió quemaduras en el 85% de su cuerpo luego de una discusión con su pareja, Carlos Humberto Bruno Paiva (43) en setiembre del 2016.

Todo ocurrió en el hogar de ambos en Tumbes. Según el primer testimonio de Rosa, Bruno reaccionó de forma violenta porque «le exigió que le devolviera un dinero que ella no tenía«. La Fiscalía indicó que fue entonces cuando Bruno le roció gasolina y le prendió fuego. Él fugó, pero la Policía lo capturó dos días después. Ella murió una semana más tarde.

Imagen:

El suertudo beneficiado por el Ministerio Público. Imagen: El Comercio

Algunas de las pruebas que demuestran que fue un feminicidio (como si la fuga fuera poco) son estas:

Por todo esto, el 13 de diciembre del año pasado, el Juzgado Penal Colegiado de la Corte Superior de Justicia de Tumbes lo condenó a 25 años de cárcel.

Pero hace tres días, el 5 de junio, la Sala Penal de Apelaciones de la Corte Superior de Justicia de Tumbes ordenó liberarlo. ¿Por qué? Por esto:

«En el proceso no se comprobó que Bruno haya asesinado a su conviviente, sino que ella se habría quemado mientras le prendía fuego a la basura acumulada en su casa».

Para que no los olvides: los nombres de los jueces que obviaron las pruebas y decidieron liberarlo fueron:

  • José Luis Troya Acha,
  • Oswaldo Simón Velarde Abanto,
  • Óscar Ignacio Ortiz Valdiviezo.

Es verdad que la propia víctima, cuando aún permanecía viva, dijo en un segundo testimonio que las quemaduras habían sido por la quema de basura. Sin embargo, la Fiscalía cree que Rosa negó el crimen por las amenazas que recibió del sujeto.

Una violación escandalosamente impune

La Fiscalía ha apelado en el caso de Rosa, pero no siempre actúa así, como hoy.

Daniel Pérez Fierro (40) y Marcelino Vicente Palacios Barja (44), chofer y copiloto del bus Expreso Internacional Palomino, doparon a una terramoza. Ella fue dopada por ambos. Al llegar a Lima, provenientes de Arequipa, sintió dolores vaginales. El médico legista confirmó que había sido abusada. 

Los violadores confesos que ya deben estar en alguna frontera. Imagen: América TV

Los violadores confesos que ya deben estar en alguna frontera. Imagen: América TV

Los dos choferes fueron detenidos por la Policía y confesaron el delito, pero la fiscal Karina Toledo Wong decidió liberarlos basada en este alucinante argumento:

«De acuerdo con la Policía, los sujetos no continuaron con las diligencias debido a que la fiscal argumentó que los hechos ocurrieron en Nazca y que las investigaciones deben seguir en esa jurisdicción».

El exprocurador Ronald Gamarra aclaró que lo que se debió hacer fue abrir investigación e iniciar las coordinaciones con el fiscal de Nazca, pero no liberar a los autores confesos.

El Ministerio Público ha negado que la fiscal haya ordenado la liberación. Aseguran que ella pidió el traslado de los abusadores a Nazca. La Policía los desmiente. Todos se tiran la pelota mientras los violadores huyen.

Un dato que se debe tomar en cuenta es que la empresa del bus, Expreso Internacional Palomino, forma parte del conglomerado Grupo Palomino. Este grupo empresarial está vinculado al congresista fujimorista Dalmiro Palomino Ortiz. En Twitter, Dalmiro ha dicho que ya no tiene ningún vínculo con el negocio familiar. Sus hermanos, sin embargo, sí.

A ver si les avisa para que den la cara por este suceso.