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Nuevos kaprichos de Kancillería y del Kongreso vuelven a poner en aprietos las relaciones internacionales del Perú

El sábado por la noche, mientras te alistabas para ir a jugar jenga a la casa de tus patas, en el aeropuerto Jorge Chávez ocurría algo inusual. El gobierno peruano, a través de su oficina de Migraciones, no quiere dejar ingresar al país a la embajadora de la República Árabe Saharahui Democrática (RASD), Jadiyetu El Mohtar Sidahmed.

¿A quién? Explícame

Ella es Jaditeyu. Foto: Útero.Pe

Ella es Jadiyetu, embajadora de la RASD.
Foto: Útero.Pe

La RASD está geográficamente ubicada en África del Norte y desde 1976, año en que fue invadido por Marruecos, lucha por su independencia y reconocimiento como un país soberano. Los saharahuis son una de las pocas comunidades musulmanas que habla castellano, pues el territorio que ocupan fue anteriormente colonia de España. Jadiyetu, la embajadora de esa república, visita el Perú con el fin de retomar las relaciones diplomáticas y por que nuestro presidente PPK se comprometió a recibirla.

¿PPK se comprometió?

Cuando Kuczynski asistió a la juramentación del presidente de Ecuador, Lenin Moreno, el 24 de mayo pasado, se encontró con el presidente saharahui, Brahim Ghali, y se comprometió a recibir a un representante de ese país para sostener conversaciones que podrían dar origen al inicio del restablecimiento de las relaciones diplomáticas, es decir, la creación de una embajada.

El Perú reconoció a la RASD en el año 1984 durante el gobierno de Fernando Belaunde, sin embargo en 1996 rompió relaciones. Actualmente Jadiyetu ha solicitado a palacio de gobierno una cita con el presidente del Perú y está en el aeropuerto a la espera de ser atendida. Retenida bajo este argumento:

«La ciudadana saharahui cometió una infracción migratoria, ya que al haber ingresado al Perú con visa de turista [julio-agosto pasado] está impedida de realizar funciones políticas».

¿Funciones políticas?

Jadiyetu llegó al Perú proveniente de Madrid el sábado a las 5 de la tarde. Todos sus documentos estaban en regla y había presentado, incluso, su pasaporte español. A pesar de todo esto, todavía no la dejan ingresar a territorio peruano, además quisieron embarcarla ese mismo día a la sala 17 en un vuelo de regreso a Madrid, pero ella se resistió.

La arbitrariedad al parecer inexplicable del comportamiento del gobierno con la representante saharahui nos hizo revisar algunas razones para tratar de comprender su retención. Y así llegamos a esta nota de La Mula:

Imagen: captura La Mula

Ah caramba… Imagen: captura La Mula

El 29 de agosto pasado, Jadiyetu el Mohtar estuvo en Perú y sostuvo reuniones con algunos congresistas de la República. Así como nuestro país, su misión también apunta a otros de la región. La Mula entrevistó a la embajadora, quien pronunció el titular que figura en la captura de pantalla. Además, en esta misma nota denunció que el fujimorismo impidió que se presente en la Comisión de Relaciones Exteriores del Congreso, presidida por Luz Salgado, porque «haría peligrar» las relaciones entre Perú y Marruecos.

Sin embargo, cuando quiso presentarse en la Comisión de Relaciones Exteriores del Congreso de la República fue rechazada por parlamentarios de Fuerza Popular. “La oposición a mi presencia por parte de tres congresistas fujimoristas (uno de ellos, Rolando Reátegui, es presidente de la Liga de Amistad Perú-Marruecos) está articulada desde la embajada de Marruecos. El embajador teme que con mi presencia se conozca una realidad dura y cruel marcada por la brutal represión que sufren los saharauis en los territorios ocupados por Marruecos”.

Presiones, muchas presiones

Hasta ahí tenemos dos argumentos usados para retenerla en el aeropuerto de Lima.

  • Jadiyetu visita el Perú y Fuerza Popular no la deja entrar al Congreso. Su excusa: peligra relación diplomática con Marruecos.

Las relaciones diplomáticas del Perú alcanzan países en franca rivalidad:

  • Tenemos embajada de Palestina y tenemos embajada de Israel.
  • Tenemos embajada de Cuba y embajada de Estados Unidos.
  • Tenemos embajada de Corea del Norte y de Corea del Sur.

Entonces, ¿qué tan verosímil es decir que aceptar a la población saharahui pondría en peligro nuestras relaciones con Marruecos? La experiencia dice lo contrario.

El segundo argumento es este:

  • El Perú no deja entrar a Jadiyetu porque en su visita anterior «incumplió normas migratorias». La misma Cancillería a cargo de Ricardo Luna dice que «no convocó su presencia en nuestro país».

La embajadora de la RASD visita constantemente el Perú porque está en misión para poder retomar las relaciones diplomáticas. Es enviada por su país para r e t o m a r, o sea para dejar de ser una turista y poder algún día llegar, ella y cualquier representantes del gobierno saharahui, en misión diplomática.

Arbitrariedad es la palabra correcta para explicar por qué la embajadora sigue retenida en el aeropuerto. Foto: Útero.Pe

Arbitrariedad es la palabra correcta para explicar por qué la embajadora sigue retenida en el aeropuerto.
Foto: Útero.Pe

Sin embargo, a pesar de que PPK se comprometió en recibir a representantes de la RASD, el canciller Ricardo Luna sigue la línea de Fuerza Popular. Luna, el mismo que defendió el golpe de Estado perpetrado por Alberto Fujimori en 1992, además de otras vejaciones del autoritarismo. Esto es lo que informó Gustavo Gorriti sobre el pataza de PPK:

  • “El responsable del gesto análogo de este año, el actual canciller Ricardo Luna, fue un dedicado defensor diplomático del golpismo fujimorista desde poco después del golpe de 1992”.
  • “Apenas recuperé la libertad luego del golpe del 5 de abril, busqué describir (…) y exponer cuál fue la naturaleza del golpe y quiénes eran los golpistas, especialmente quién era Montesinos. Recuerdo que luego de una nota mía, publicada en The New Republic, Luna remitió una carta en la que sostenía que mi reportaje sobre el papel de Montesinos era básicamente un caso de teorías conspirativas y delirio de persecución”.

Entonces hasta ahí tenemos:

  1. La embajadora Jadiyetu visita el Perú en agosto para buscar restablecer las relaciones diplomáticas con su país.
  2. Ese mes habló sobre las razones por las que nuestro país y el suyo se alejaron, responsabilizando directamente a Vladimiro Montesinos.
  3. El Kongreso no la recibió con el pretexto de que Marruecos se iba a molestar. Ella se va del país.
  4. Jadiyetu retorna el sábado para continuar con su trabajo y porque PPK se había comprometido en recibirla.
  5. Cancillería, que está dirigida por un filofujimorista, no reconoce su visita y no la deja ingresar al país.

Y, a pesar de su compromiso, el presidente PPK no ha dicho nada al respecto. La embajadora continúa en el aeropuerto retenida y recibiendo ayuda de algunos congresistas como Marisa Glave y Alberto Quintanilla. Una vez más, como sucedió con el gobierno francés, Luna causa alboroto desde su despacho.