denuncia , discriminación , libertades , noticias , politica , redes sociales , sociedad , violencia Jueves, 7 septiembre 2017

Un comunicado de Essalud nos acaba de poner la piel de gallina por las cifras reveladas de abortos clandestinos

Esta mañana la página de Facebook del congresista Alberto de Belaunde difundió una fotografía en la que aparecía un aviso en la sala de emergencias del hospital Abancay I, donde les decían a los pacientes que, si llegan al establecimiento con diagnóstico de haberse practicado un aborto y que este haya resultado incompleto, darían aviso a la Policía. 

Dime qué entienden. Imagen: Facebook Alberto de Belaunde

Si abortas, llamaremos a la Policía. 
Imagen: Facebook Alberto de Belaunde

El legislador advirtió que la lectura del mensaje parecía una amenaza contra las mujeres, a quienes, básicamente se les aclaraba que, si abortaban, era mejor dejarse morir.

«Esta foto correspondería a Essalud Abancay, ha sido compartida en un grupo de Facebook.

¿Cuál creen que será el resultado de un letrero así? Mujeres que hayan tenido un aborto clandestino y cuya vida peligre no irán a Essalud por temor. Y morirán.

Essalud no debe tratar como delincuentes a sus pacientes. Debe salvarles la vida».

Al instante, las redes sociales saltaron en voz de protesta. La ONG Promsex sacó un comunicado explicando que una paciente que llegue a un establecimiento de salud con signos de haberse practicado un aborto clandestino, merece el mismo trato que cualquier otra, pues la prioridad de todo centro de salud es preservar la vida.

«La Organización Mundial de la Salud señala que se debe asegurar que las mujeres que se presentan con complicaciones de un aborto inseguro o ilegal reciban tratamiento de manera urgente y respetuosa, como cualquier otro paciente de urgencia, sin comportamientos punitivos, prejuiciosos o tendenciosos».

Más tarde, Essalud respondió aclarando la naturaleza de ese aviso en el hospital de la provincia de Abancay, en Apurímac, a través de un comunicado. En este informa que si se llama a la Policía no es para acusar a la paciente sino para «dar con el falso médico que practicó ese aborto clandestino».

Imagen: Essalud

Imagen: Essalud

La pregunta que cae de madura es:

¿Acaso también colocan en ese hospital avisos por si algún paciente llega con un balazo en la pierna, o con un corte de arma blanca para dar con los culpables?

Sin embargo, ese no es el único sinsabor que nos dejó el comunicado. Lo más alarmante aún fueron los números que detalla Essalud contextualizando su información.

Las escalofriantes cifras

Al finalizar sus explicaciones. Essalud suelta una cifra que ha pasado casi desapercibida en su comunicado:

Solo en Apurímac, el personal atiende más de tres mil emergencias cada mes. Muchas de ellas por complicaciones a raíz de abortos clandestinos. 

Ante ese indicador alarmante, el personal asistencial ha expresado su preocupación por el gran número de pacientes que acude a los hospitales de Essalud por presuntas complicaciones como consecuencia de abortos clandestinos».

¿Leyeron bien?

Más de  t r e s  m i l  c a s o s

Muchos de ellos  por  a b o r t o s  c l a n d e s t i n o s

El personal del hospital está p r e o c u p a d o  p o r  e s t a s  c i f r a s

Y solo es en Apurímac

Ala, solo en Apurímac. Composición Útero.Pe

Ala, solo en Apurímac.
Composición Útero.Pe

¿Se imaginan si trasladamos esa cifra a todo el Perú?

Según los números actualizados del Instituto Nacional de Estadística e Informática (INEI), hasta el 2015 el departamento de Apurímac registraba una población total de 458,830 personas, 21 veces menos que la población de Lima (9’834,631).

Pueden ver las cifras de población en este enlace. Imagen: INEI

Pueden ver las cifras de población de todo el Perú en este enlace.
Imagen: INEI

Departamentos con cifras de pobreza similares a las de Apurímac son los de Amazonas, Ayacucho, Huancavelica y Pasco, curiosamente su número de habitantes es similar. Los demás lugares, como Lima, Arequipa, Cusco, Ancash, Lambayeque o La Libertad, superan el millón de personas.

Sin embargo, haremos un ejercicio práctico solo con las cifras lanzadas por Essalud casi involuntaariamente y multiplicaremos el número de casos de emergencias, entre las que se encuentran las de aborto clandestino, que los centros de salud de esa ciudad recibe anualmente.

3,000 por mes.

36,000 por año.

Al año estamos hablando de miles de casos solo en Apurímac,cuya densidad de población no llega ni al medio millón de habitantes. ¿Qué pasará en el resto de ciudades de todo el país? Sobre todo en aquellas que superan el millón de habitantes? ¿Qué sucederá en Lima con sus casi 10 millones de personas?

El número no deja de ser alarmante, sobre todo en un país en el que el aborto es todavía ilegal y penado con cárcel. Solo contamos con aborto terapéutico y aún discutimos en el Congreso el aborto por violación.

Esto, que debería ser una emergencia nacional y un escándalo de portada, solo está afectando a las mujeres peruanas, cuya representación en el Parlamento está reducida a la tercera parte. De 130 legisladores solo 36 son mujeres. Algo muy malo está pasando en nuestras narices y no estamos haciendo nada al respecto.