Si aún crees que la Marcha del Orgullo LGTBi es innecesaria debes leer los inhumanos comentarios de este post

El Día del Orgullo LGTBi se conmemora a escala mundial porque el odio contra esta comunidad es mundial. Una ley ayuda a proteger a este grupo, pero no asegura que la homotransfobia se extinga. No significa que no deban aprobarse estas leyes, porque ocurre lo mismo con las normas antirracistas: contribuyen a sancionar las injusticias, pero no eliminan el racismo; y a nadie se le ocurriría exigir que no se legisle sobre ello.

Un ejemplo de lo que decimos es Argentina, donde el matrimonio igualitario es legal, pero donde al mismo tiempo existen personajes que desatan su odio irracional contra un joven que falleció solo por ser gay.

Imagen: Facebook

El portal argentino Diario Crónica publicó la carta de Agustín Ramírez, un joven que le escribió una emotiva despedida a Marcos Agustín Velázquez, quien falleció luego de que el bus donde se trasladaba se volcara en una carretera argentina.

Las primeras palabras de Agustín fueron escritas el domingo 25 de junio, cuando se conocía que Marcos estaba herido tras el accidente. El joven se mostraba impotente por no poder trasladarse hasta el lugar del accidente y aún mantenía la fe de verlo vivo:

«Yo sé que la vida te va a dar una segunda oportunidad, yo sé que vas a llegar con esa sonrisa perfecta y vamos a seguir construyendo esto hermoso que tenemos y darte muchos abrazos. Estoy rezando por vos, mi amor, vas a salir de esta te lo prometo».

El miércoles 28, sin embargo, Agustín se despedía de su enamorado:

«No va a ser lo mismo caminar sin que me agarres de la mano, sin tus ataques de cosquillas hasta que me hacías llorar de la risa y hacerme doler la panza, juro que a partir de ahora nada va a volver a ser lo mismo, ya no tiene sentido mí vida, ya no».

Marcos no era un congresista corrupto, ni un empresario explotador, ni un traficante de armas. Su delito fue ser gay, según se leyó en muchos de los vergonzosos comentarios que se publicaron en el post del diario Crónica. Todos burlándose del dolor de Agustín y demostrando una vez más que para ellos lo homosexual está por debajo de lo humano.

Ese odio se hace muy familiar porque los leemos en los portales de todo el mundo, incluyendo el Perú. Si con tanta homofobia aún se cree que no es necesario salir a las calles para reivindicar los derechos de la comunidad LGTBi, entonces pertenecen al grupo del «no soy homofóbico, pero…». Aún puede redimirse:

La marcha será mañana. Imagen: Facebook