Esta universidad privada está a punto de condecorar al máximo copión de la Iglesia en el Perú

Andy Livise
Pienso, luego me achoro. @ElcholacoLa Universidad San Ignacio de Loyola (USIL) y sus criterios para condecorar no parecen dar un mensaje muy positivo a sus alumnos. Incluso, quién sabe, tal vez, si algún día llegan a ser cardenales, se pasen por alto algunas «faltas» y puedan hasta recibir una condecoración tan importante como la de Doctor Horroris Honoris Causa.
Dicha casa de estudios (que hasta la fecha todavía no tiene licencia de la Sunedu) entregará la distinción Doctor Honoris Causa a Juan Luis Cipriani, cardenal de la Iglesia Católica en el Perú y plagiador de los textos del Papa Benedicto XVI.
Según la invitación a la que tuvo acceso Útero.Pe (filtradito, nomás, porque nadie nos invita nunca a nada), la ceremonia se realizará el jueves de la siguiente semana porque mucho roche entregarlo este Jueves Santo, a las 7 de la noche en el campus de La Molina. Este título honorífico es entregado por las universidades a personajes eminentes que han destacado en el ámbito profesional.
El motivo para entregar esta condecoración, según se lee, es para reconocer su «destacada trayectoria como pastor, teólogo y consejero de las nuevas generaciones en el Perú».

«Consejero de las nuevas generaciones». Un hombre moderno. Imagen: El Comercio
La causa parece ser otra, pues según informaron Caretas y El Comercio, desde el 2012, Raúl Diez Canseco Terry, fundador presidente de la USIL, buscaba el título de «Católica» para su casa de estudios aprovechando el problema de Cipriani con la PUCP. O sea, a falta PUCP, buenas son las USIL.

Diez Canseco expiando sus pecados al lado del representante de Dios en el Perú. Imagen: USIL
Por eso no es la primera vez que la USIL condecora al «excelentísimo». En diciembre del año pasado, la universidad le otorgó un «reconocimiento especial por su trabajo como garante y mediador en las negociaciones de paz» entre el Movimiento Revolucionario Túpac Amaru y el Estado durante la toma de la residencia del embajador japonés.
Como recuerdan todos (menos las autoridades de la USIL), el diario El Comercio retiró la columna semanal de Cipriani luego de que su monaguillo preferido nuestro ámix, Víctor Caballero, revelara sus plagios a través de este útero. Aquí les dejamos los copipasteos que, seguramente, el señor Diez Canseco Terry no vio:
Ya saben, gente de la USIL. Si su profe los descubre plagiando, respondan que en lugar de una sanción, merecen un Honoris Causa.
Más procrastinación
