Gracias al caso Sodalicio empezó la bronca pública dentro del fujimorismo
Andy Livise
Pienso, luego me achoro. @ElcholacoEl martes, el fujimorismo archivó la propuesta que buscaba abrir una comisión que investigue los abusos sexuales, físicos y psicológicos cometidos por las principales autoridades del Sodalicio de Vida Cristiana.
O sea, la propuesta fue archivada por el Consejo Directivo del Parlamento, pero este grupo de 26 legisladores está compuesto por 14 fujimoristas:
Al final solo 17 votaron congresistas y el resultado a favor o en contra del archivamiento del caso fue este:
- Fuerza Popular: A favor (10).
- Peruanos por el Kambio: En contra (3).
- Frente Amplio: En contra (3).
- Apra: Se abstiene (1).
- Acción Popular: Se abstiene (1).
Decíamos que el fujimorismo mandó al tacho la sola propuesta de investigar este caso. Respondieron (Luis Galarreta, Úrsula Letona y Daniel Salaverry) que los hechos cometidos contra esos adolescentes y menores eran condenables, indignantes y detestables. Hechos condenables que no los conmovieron tanto como para abrir una investigación.
Algunos de los argumentos dados por el vocero de Fuerza Popular, Lucho Galarreta, fueron más risibles que Phillip Butters tuiteando que le dieron una hora más de programa:
Dijo que este tema debía ser visto entre los organismos judiciales del país. ¡Ahhh!, como el caso Lava Jato, La Centralita, la compra del satélite, las agendas de Nadine y como casi el 80% de los temas que investiga el Congreso. Yia.
Para paliar el escándalo que estalló luego del archivo, los fujimoristas presentaron un proyecto de ley para que los delitos de violación contra menores de edad no prescriban.
El problema es que de aprobarse la ley, esta no se aplica a los casos que ocurrieron antes de haber sido aprobada, porque:
n i n g u n a l e y e s r e t r o a c t i v a.
Galarreta también había manifestado en RPP que traer a los denunciados sería materialmente imposible porque se encuentran en el extranjero. El legislador ppkausa, Alberto de Belaunde, no estuvo de acuerdo y dijo que existen denunciados del Sodalicio que se encuentran en Lima. Quien tampoco estuvo de acuerdo con Galarreta fue Kenji Fujimori, el protagonista de esta historia.
El número 2 de Fuerza Popular gritó «¡Firmes!» y un buen grupo de la bancada se alineó y se arrepintieron de haber votado por el archivo del caso:
Daniel Salaverry, sin embargo, demostró por qué es #TeamKeiko y aseguró que Kenji no había expresado esa opinión durante la reunión de bancada, aunque luego no recordó si el menor de los Fujimori acudió a dicha reunión.
Salaverry también nos regaló un dato:
«Yo he apoyado la moción de De Belaunde (de investigar al Sodalicio) pero queda a un lado cuando la bancada adopta una posición. Esa es la que prima”.
¿Y por qué habrá sido una decisión de bancada?
Según La República, Galarreta sostuvo una reunión con el superior general del Sodalicio, Alessandro Moroni y Pier Figari, quien fue jefe de campaña de Keiko y además es primo del sacerdote sodálite Juan Mendoza Figari. Galarreta negó esa cita y dijo que creía que algunos de sus legisladores se reunieron con miembros del Sodalicio, pero que «eso no tiene nada de malo».
Hoy en la mañana, nuestra tía Rosa María Palacios dijo en su programa que Daniel Salaverry taaaambién se había reunido con Moroni y con el cura Juan Mendoza Figari y que, además, Pier Figari se había ido en yolo y había ordenado el archivo de la investigación sin consultarle a Keiko Fujimori.
Pi pi pi, este carro está retrocediendo
Luego del jalón de orejas de Kenji, ayer la bancada planteó que reconsideraría su voto ante la propuesta de investigar al Sodalicio. Hoy, ya sabemos que su reconsideración consiste en pedirle a la Defensoría del Pueblo que se encargue del caso.
O sea, se han lavado las manos. Acomode su butaca, que Kenji no tardará en pronunciarse. Sobre todo si fue él quien pidió a la presidenta del Congreso, Luz Salgado, que se investigue este caso.
Y lo más importante: