metaperiodismo , webeo Lunes, 20 julio 2015

Celebrity Deathmatch: Beto Ortiz vs Nicolás Lúcar por el honor de Nadine (y de Alan)

YOU WERE THE CHOSEN ONE!!!!

Beto y Lúcar son, quizás, los frenemies más frenemies de nuestro colegaje. Alguna vez fueron maestro y aprendiz; hoy son nuestros Camus vs Hyoga, Obi-Wan vs Anakin, Capitán América vs Winter Soldier. Pueden decir y pensar lo que quieran de ambos, pero solo uno fue ajochado en público por nuestro último héroe republicano. Eso debería haberle bastado a Lúcar para rehuirle a la política tanto como a los ascensores, pero no aprende.

Así que esto pasó el viernes:

Lúcar sabe que no hay nada más aglutinador que el antiaprismo (o el antifujimorismo). Así que meter a Alan en el cuento es súper vendedor. Lo cierto es que la mayoría de versiones apuntan a que era el infame chisme tuvo como origen a su principal implicado. ¿Por qué Lúcar no lo menciona? Aquí es donde aparece Beto Ortiz, en una columna dominguera intitulada «Mi amigo Rodrigo». Algunos extractos:

…la única vez en mi vida que vi en persona al ahora célebre Rodrigo Arosemena fue en la súper fiesta que Nicolás Lúcar ofreció para su esposa en mayo del 2012. (…)

No recuerdo haber visto aquella noche al otro men de Antalsis, el afamado Juan Carlos Rivera Ydrogo, ‘Chocherín’. Donde sí recuerdo haberlo visto fue en aquella entrevista exclusiva que decidió concederle a Lúcar y en la que nos contó cómo cargaba un maletín llenecito de dinero –¿venezolano?– para pagar la publicidad electoral nacionalista. Entre canapé y canapé, Maurice [Mauricio Fernandini] –que funge de guía en el who is who las raras veces que visito círculos sociales a los que ni Nadine ni yo pertenecemos– me contó que Arosemena –el bien plantado socialité– habíase matrimoniado con la regia y multitalentosa Gaby Lizier.

Hoy, mi natural chismosería me llevó a su Facebook, donde me enteré de que aquella fue una boda playera a todo meter, en Punta Sal, que contó con la presencia estelar de media Lima y del propio Nico, sin ir más lejos. Que Gaby es, además, administradora de empresas de la Universidad de Miami, directora del Golf Los Incas, experta en acabados de construcción y una de las más entusiastas alumnas del distinguido Taller de Alta Cocina “Divina Despensa” que la espléndida chef Panchita [Frances Crousillat, esposa de Lúcar] dicta todos los viernes en su propia casa.

Ahora tengamos en cuenta una cosa. Tanto Lúcar como Beto trabajan en Latina, un canal que, con una saludable vocación de pluralidad, ha convertido las broncas entre sus periodistas en sello de la casa (admitan que es divertido). No solo eso: el programa de Lúcar antecede al de Beto. Y, anoche, en Punto Final, justo antes de darle el pase a quien esa mañana lo había echado, Nicolás dijo esto:

(Me encanta el cherry inicial a su programa en Radio Exitosa)

Pero esto no fue suficiente. Hoy, Lúcar, en su columna del diario Exitosa, le respondió a Beto intentando parodiar su estilo. Según Nicolás, esto fue escrito por «el amix de Carlita«. Primero, describe una escena en la que, supuestamente, Alan García se irrita ante la revelación del «bigotón» y «no hay sobredosis de litio» que lo calme:

«Hay que contestarle» le dice alguien, «pero ¿si es verdad lo que dice el bigotón?» le recuerda otro.
«¡Una bomba!», grita el exmandatario. Y no está pidiendo que revienten al periodista sino que le traigan urgente uno de esos tóxicos pasteles rellenos de crema con los que cultiva su atrevida figura. Poco a poco, tras la tercera bomba, se calma. 

Aquí aparezco yo. En medio de la consternación, Carlita tiene la idea de que yo entre en escena y me llama. Yo, por supuesto, también estaba dando botes porque solo hay una cosa que me irrita más que no salir en los periódicos: que salga Lúcar. Con la pluma que me caracteriza, que no es tan aguda ni tan rentable como la de Baily, salgo en defensa de mi suegro virtual. El resto de la historia ya la conocen… Solo espero que ahora, ¡¡¡¡¡por favor!!!!!, hablen de mí.

Insisto: este es Lúcar imitando a Beto (o algo así), con hartos golpes bajos. Seguramente ya vendrá la respuesta de Ortiz. Mientras tanto, seguiremos viendo, un poco consternados, como Nicolás fuckin Lúcar se convierte en el referente periodístico de los indignados antifujimoristas/antiapristas. Cosas veredes, Sancho.