La Calata Culta Lunes, 29 junio 2015

Susan León: “Yo hago el amor todo el tiempo”

La Calata Culta

Leslie Guevara es directora de la escuela de escritura Machucabotones. Es autora invitada en los libros de relatos "Sexo al cubo", "Hermosos ruidos" y "21 relatos sobre mujeres que lucharon por la independencia del Perú". Es editora del libro “Once Veces Tú”. Ha realizado talleres de narrativa en cárceles peruanas, en coordinación con la Asociación Dignidad Humana y Solidaridad fundada por el padre Hubert Lanssiers. Actualmente escribe su primer libro.

Llego a la casa de la actriz Susan León y me dicen que aún no viene del tai chi. Todos los días hace tai chi. Yo la espero, porque conversar con una de las mujeres más recordadas y queridas del Perú no es algo que suceda todos los días. Susan tiene hace más de 20 años una productora de eventos, y dice que trabaja solamente con mujeres. Dice que son las de mayor garra. Me cuenta que comenzó su vida en el modelaje a los 7 años, y que desde ahí no ha parado. En estos días se le puede ir a ver junto a Zelma Gálvez en “El Mitin” (todos los viernes y sábados de junio y julio a las 8:00 pm. En “Made in Perú”, Av. Grau 701, Barranco).

¿Desde cuándo haces tai chi?

Soy campeona nacional de tai chi, y lo practico desde el año 2000. Porque amo la cultura china, el mundo holístico chino. La psicoterapia también está muy presente en mi vida.

¿Cómo así?

Siempre me interesó mucho el ser humano en sus diferentes conductas. Me interesó porque quería saber cómo me estaba sintiendo yo. No es que vas al doctor y te internas y te dicen cómo están tus emociones: yo siempre he creído que todo está muy conectado, el universo con el ser humano, y uno tiene que cuestionarse las cosas. Estudio los domingos en la Asociación Qigong, y hago una maestría de Desarrollo Organizacional en Alta Dirección en la universidad Garcilaso.

¿Siempre has sido así?

En realidad vengo de un hogar sin hogar: eso, de alguna manera, te lleva a ser una guerrera. Y cuando eres una guerrera comienzas a salir adelante y a darte cuenta de lo que te sucede por dentro. Dices A ver, qué me pasa, ¿por qué tengo miedo? Tú misma te vas psicoanalizando sin darte cuenta.

Y ahora, en esta etapa de tu vida, ¿cómo te sientes?

Muy bien, tranquila. Creo que me ha costado acostumbrarme a saber que soy exitosa. Porque a veces uno no reconoce sus propios logros.

¿En qué momento te diste cuenta de que eres exitosa?

En realidad hace poco. Soy trabajólica: trabajo mucho y el trabajo se hace un círculo vicioso en mi vida. Y hace unos meses paré y leí todo mi CV y me dije Creo que debo parar un poquito. Ahora todo lo manejo con tranquilidad, las cosas ya no me afectan como antes.

En tu CV hay programas como “Una noche con Susan”. ¿Cómo nació, recuerdas?

A raíz de una combinación de dos programas: “A la cama con Moria” y un programa que hacían en España, en el que se entrevistaba en un jacuzzi. Como yo venía con la imagen de sexy, decidieron darme ese programa. Un programa un poco grande, como siempre digo. La cama me quedaba grande.

¿Qué edad tenías ahí?

24 años, vividos más en disciplina que en libertad.

¿Te gustaba hacer ese programa?

Más o menos, había cosas que no entendía mucho. Ahora, viéndolo a la distancia, creo que era un mundo que no conocía tanto. Entonces tenía algunas limitaciones. Es un aprendizaje.

¿Cómo crees que se ve reflejada tu infancia en tu presente?

Todo está conectado, definitivamente. En este momento soy lo que yo quiero ser, no lo que mis padres han hecho de mí, y eso es lo más importante.

¿Te arrepientes de algo?

No, porque todo en la vida es aprendizaje, todo es lo que he tenido que vivir. Y así ha tenido que ser.

¿Cómo eres tú como empresaria?

Muy organizada, porque me gusta lo que hago. La empresa nace con los calendarios: “Susan León producciones y representaciones”. Esto es en el año 94. Creo que ahora hacemos mejor las cosas que antes, ja ja ja. Y me dedico enteramente a las academias, porque son parte de mi vida: a mí me gusta la enseñanza. Tengo una academia “cuna de talentos” en Villa El Salvador, y otra en Lima norte. Si me preguntas por qué a esas distancias, no sabría decirte. Será que ahí me necesitan, por algo será. No es casualidad nada.

¿Por qué no tuviste hijos?

Si hubiera tenido hijos habría tenido que enseñar solo a algunas personas, y no a tantas como finalmente ha sucedido. Salir embarazada hubiera sido asumir un compromiso más grande. Siempre he trabajado mucho, y no he sentido la necesidad de ser madre.

¿Qué es el amor para ti?

Es todo: es esta entrevista, es mis perros. Es un saludo de una persona que no conozco en la calle. Es la conexión con otro ser humano que sea capaz de dar y recibir, y tú tienes que conectarte con el amor. Todo lo que hago lo hago con amor. Yo hago el amor todo el tiempo.

¿Cómo haces para tener buen ánimo?

Primero, me levanto temprano: creo que es la mejor hora de la vida. Comienzo agradeciéndole a Dios, pongo mis pies sobre la tierra y me voy a hacer un poco de deporte. Después de la tranquilidad viene el disfrute, ¿no? El disfrutar te lleva a reírte, a pasarla bien. Y como todos somos humanos siempre pasan cosas como el tráfico, las facturas que no se pagan…

¿Y qué es el sexo para ti?

El sexo es el premio en una relación. Si hay una relación buena en todos los aspectos hay un premio, que es el disfrute sexual. Pero si no, todo bien.

¿Qué piensas de la televisión ahora?

Que se ha ido mucho a lo sexual, el primer enganche es el sexo. Eso no me gusta.

¿En tus tiempos era así?

Había insinuación, había morbo, pero no era tan explícito como ahora. A ver, si vamos a comparar, el programa Fantástico también era un programa de jóvenes, y todos eran felices. Y nadie enamoraba a nadie, y si se enamoraban no salían al aire diciendo “estoy con fulano o mengano”. No era una prioridad en la vida tener pareja ni enamorarse. ¡Ahora las carencias afectivas son tan fuertes! Nadie puede estar solo. ¡Cómo puede ser!, te dicen. Tienen que cambiar de calzón como de enamorado. Las personas están desesperadas por no sentir la soledad, cuando en realidad la soledad es la única que va a hacer que te conozcas a ti misma.

¿Cómo te llevas con las redes sociales?

El mundo ha cambiado muchísimo, yo sigo manteniendo mi intimidad. Yo no tengo que estar contando que me voy a caminar dos pasos, ni tomarle fotos a mi comida. Yo tengo mi intimidad, y eso es lo más valioso que tengo.

Estás en la película peruana “El último verano”, que se estrena este año. ¿De qué va tu papel?

Hago de una mujer que tiene problemas con su hija, la típica relación de una madre conflictuada. Es un papel cargado, soy alcohólica. Pero he disfrutado haciéndolo y ya sale pronto.

¿En qué proyecto estás?

Las academias y la maestría. También hemos hecho un pequeño canal por web, Inbox TV. Por otro lado, estoy haciendo una obra de teatro junto con Zelma Gálvez que se llama “El mitin”: viernes y sábados solamente, porque estoy estudiando los otros los días. Y lo sábados y domingos hago “El gato con botas”.

¿Qué le dirías a las chicas que quieren incursionar en la televisión?

Que se preparen y que estudien, que tengan control emocional. Porque, como toda carrera, está llena de tentaciones. El dinero y la fama no son todo.

La Calata Culta

Leslie Guevara es directora de la escuela de escritura Machucabotones. Es autora invitada en los libros de relatos "Sexo al cubo", "Hermosos ruidos" y "21 relatos sobre mujeres que lucharon por la independencia del Perú". Es editora del libro “Once Veces Tú”. Ha realizado talleres de narrativa en cárceles peruanas, en coordinación con la Asociación Dignidad Humana y Solidaridad fundada por el padre Hubert Lanssiers. Actualmente escribe su primer libro.