Otra vez Chile un paso adelante: aprobaron la Unión Civil para parejas homosexuales

Histórico: activistas celebran su victoria delante del Palacio de La Moneda. Foto: El Ciudadano.

Ayer, mientras Mauricio Diez Canseco se lanzaba a la política, en Chile se discutía y aprobaba un proyecto de ley que le cambiará la vida a millones de chilenos. Después de una larga discusión el Acuerdo de  Unión Civil para homosexuales y convivientes quedó listo para que se promulgue.

Veamos cómo quedamos nosotros después de esta noticia.

La minoría de Sudamérica

Con esta nueva medida, así queda el panorama en Sudamérica.

Somos parte de esa horrible minoría. Imagen: AFP

Como pueden ver en el mapa de France Press, Perú es uno de los cuatro países junto con Paraguay, Bolivia y Venezuela donde la Unión Civil todavía no ha sido aprobada. Es decir, solo los países menos desarrollados de la región (y nosotros) se resisten a reconocer derechos.

El porcentaje de aprobación de la población peruana sobre este derecho también es bastante triste, solo el 26% de los peruanos está de acuerdo con que los homosexuales tengan los mismos derechos que los otros peruanos. Comparen esto con el 65% de chilenos que –ya en el 2004– estaba de acuerdo con la unión civil. Una diferencia abismal.

En Chile, además, políticos de tiendas distintas, incluidos los presidentes Piñera –en cuyo gobierno de derecha se empezó a gestar el proyecto– y Bachelet, se mostraron abiertamente a favor de la medida. En cambio, en nuestro país, recordarán todo lo que pasó aquí cuando el congresista Julio Rosas junto a otros religiosos y políticos sabotearon el proyecto de Unión Civil. Ni la declaración del congresista Carlos Bruce revelando su homosexualidad pudo hacer la diferencia.

El pastor Linares le agradecía a Jorge Del Castillo

Pfff.

«Nadie será más discriminado»

Pero las cosas en Chile tampoco fueron tan fáciles. Se trata, probablemente, del país más conservador de América Latina. Hace 11 años, desde el 2003, que se venía pidiendo que se reconozcan los derechos no solo de los homosexuales sino de todas las personas que no querían casarse necesariamente pero sí tener los mismos derechos. Sí, esta unión civil también incluye a convivientes heterosexuales.

En el camino, varios proyectos fueron archivados, se rechazaron enmiendas constitucionales que hubieran permitido el matrimonio entre parejas del mismo sexo y el Tribunal Constitucional también se pronunció en contra. Sin embargo, la movilización ciudadana, finalmente, consiguió su objetivo.

Uno de los afiches del movimiento «Pacto por la Unión Civil» (PUC)

La Cámara de Diputados aprobó abrumadoramente el proyecto de ley el 20 de enero de 2015, con 86 votos a favor, 23 en contra y 2 abstenciones. Ayer finalizó el trámite administrativo y quedó listo para su promulgación por la presidenta Bachelet.

Esto fue lo que dijo el presidente del Movimiento de Integración y Liberación Homosexual (Movilh), Rolando Jiménez, cuando se aprobó el proyecto:

«Han pasado 11 años desde que ingresamos la primera ley de uniones civiles en el Congreso Nacional, queremos dedicar este triunfo a las familias homoparentales, a todas aquellas parejas heterosexuales que no quisieron casarse y que fueron estigmatizadas a lo largo de la historia».

celebración en el senado. Foto: Reuters

Por su parte, Isabel Allende, Presidenta del Senado – y una de las que presentó, en el 2008, un proyecto que terminaría archivado– dijo que con esta aprobación se le puso fin a la discriminación:

«Nadie más será discriminado, sean parejas homosexuales, heterosexuales, que optan por una convivencia y que con esta legislación tienen plenamente garantizados sus derechos»

Se prevé que la promulgación se dará en marzo y que seis meses después ya se podría hacer efectiva la primera unión civil

Nuevamente, nos da envidia Chile.