El nacionalismo se come por dentro: ¿cuántas facciones hay dentro de Palacio y por qué odian a Ana Jara?

«Operación Jara», el nuevo destape de Correo Semanal

La reciente revelación de la Revista Correo, que así como quien no quiere la cosa anda provocando sismos semanales en el gobierno, es breve pero concisa: parece que alguien quiere bajarse a la premier Ana Jara.

El periodista Américo Zambrano, quien hizo la primera revelación de los reglajes contra la oposición, lo cuenta así.

¿Qué tienen en su contra?

Acá vamos a entrar con pinzas pues finalmente lo que importa es que alguien se quiere bajar a Ana Jara. Los documentos conseguidos por el periodista de Correo Semanal, según este, fueron filtrados a la prensa para probar que Jara «está haciendo lo que quiere en la Presidencia del Consejo de Ministros»:

(…) el «Expediente Jara» incluye abundante documentación obtenida en la Presidencia del Consejo de Ministros (PCM) como oficios firmados por la propia Jara, además de memorandos de la Oficina de Asuntos Financieros, de la Oficina de Recursos Humanos y de la Secretaría General de la PCM.

La documentación, de acuerdo a las fuentes del Ejecutivo que filtraron este expediente, indicaría que la premier Jara «está pagando exorbitantes salarios a su gabinete de asesores y su personal de extrema confianza. Sueldos que incluso son superiores al del propio Presidente de la República».

Lo cierto es que el personal que trabaja con Jara ha desmentido los rumores de las planillas doradas. Según explican, el marco legal vigente permite contratar a personal calificado y pagarles más de 15,600 soles. Explican que todo es legal aquí.

Un expediente para Jara

Zambrano esta vez se permite dudar respecto a la procedencia del ‘file’ que lleva el nombre de Jara. Si bien se rumoreaba que la DINI también seguía a la Premier, como remarca el periodista, no existe prueba concreta de ello:

En el despacho de Jara nos aseguraron desconocer si la premier ha sufrido o no de un seguimiento por parte de la DINI, como especulan los medios de comunicación. (…) Lo que sí ha descubierto el propio despacho de la PCM es otra cosa: una clara intención por desacreditarla que nace del propio Palacio de Gobierno.

Más claro aún, esta es la frase que recoge Zambrano de una de sus fuentes:

«Está que jode la tía, hay que sacarle la mierda».

¿Por qué jode Jara?

No es por nada, pero la premier es quizás la única persona en el gobierno que ha reaccionado de manera correcta ante los reglajes. Mientras que Humala se hacía el loco y Urresti lo negaba tajantemente, ella decía esto:

No solo eso, también logró que Urresti deje de levantar tanto humo desde Twitter:

Desde entonces Urresti se dedica a retuitear y nada más.

Esto es algo que remarca Zambrano en su reportaje:

Un ejemplo del ‘estilo Jara’ se produjo el jueves 18 pasado. Luego de que se revelara en esta publicación el seguimiento a ex ministros apristas, empresarios y otros personajes de la oposicion, Jara convocó a su despacho con carácter de urgencia al jefe de la DINI, capitán EP (r) Javier Briceño Carpio, al director ejecutivo de la DINI, capitán PNP (r) Iván Kamisaki Sotomayor, y al jefe de la Dirección de Inteligencia de la Policía (Dirin).

A todos ellos les exigió explicaciones sobre los videos y documentos de seguimiento propalados por esta revista y les solicitó que la ayuden a esclarecer estos hechos en una conferencia de prensa. Los funcionarios de inteligencia se negaron, alegando que no tenían autorización del presidente Humala. Jara montó en cólera y los obligó a sentarse junto con ella para responder las pregunta de la prensa sobre las acusaciones de reglaje a la oposición. 

La teoría es que Jara no avisa qué va a hacer ni qué va a decir. Más bien se encarga de fiscalizar todo lo que ocurre alrededor de Humala. Eso es lo que a alguien le jode.

Pero, ¿a quién le jode? ¿Será que le jode al mismo Presidente? Ya sabemos cómo reacciona con los premieres independientes. Lo único certero es que se viene el huayco. Hasta ahora seguimos esperando la reacción de Ana Jara.

Mientras tanto, Nadine tuitea:

Evidentemente alguien del gobierno quiso usar a Correo Semanal para desprestigiar a la ministra Jara, atentando con lo que parece ser su activo más importante: su honestidad (vamos, nadie duda de eso).

Al parecer sí existe una facción dentro del gobierno, el problema es que dicha facción está en su contra.