Keiko Fujimori le puso 08 al gobierno de Humala. Ya pues. Muy usura, ya.

Es momento de las evaluaciones de fin de año. En estos días de diciembre acostumbramos a ponernos reflexivos y sopesar nuestras acciones con ponderación… y un montón de otras cosas que Keiko Fujimori no hizo cuando le preguntaron cómo calificaría al gobierno de Ollanta Humala:

Habló la profe.

Asu qué mala, Miss Keiko. Sus razones, dijo, son la economía y la inseguridad ciudadana. Pero no solo eso. También pidió derogar la Ley Pulpín:

Llama la atención en este caso la terquedad y lo obcecado que está el presidente de la República, porque no somos 4 o 5 políticos, hay partidos políticos y hay varios que estamos en desacuerdo, hay miles de jóvenes que se han pronunciado en contra. 

Lo más irónico es que Keiko dio estas declaraciones luego de visitar a una persona contra la que miles de jóvenes se pronunciaron en contra: su papi.

Y como en estas fechas a nosotros también nos gustan las evaluaciones, vamos dar 3 razones por las que hubiera sido mejor que Keiko se quedara calladita:

1. Su bancada votó a favor de «Ley Pulpín»

Foto: El Comercio

Hasta su hermano Kenji Fujimori le dijo Sí a nuevo régimen laboral juvenil. Claro, ahora que miles de jóvenes han salido a las calles a protestar, les parece una «terquedad» del Gobierno. Eso sí, reconocemos que ha sido una de las peores ideas de Humala, pero hay que ser consecuentes con las votaciones en el Congreso. Todos ellos no estuvieron en contra de la «Ley Pulpín», Keiko:

• Alejandro Aguinaga
• Aldo Bardález
• Nestor Valqui
• Francisco Ccama
• Cecilia Chacón
• Martha Chávez
• Leyla Chihuan
• Luisa María Cuculiza
• Kenji Fujimori
• Julio Gagó
• Ramón Kobashigawa
• María López
• Antonio Medina
• Elard Melgar
• Angel Neyra
• Federico Pariona
• Rolando Reátegui
• Julio Rosas
• Octavio Salazar
• Luz Salgado
• Freddy Sarmiento
• Pedro Spadaro
• Carlos Tubino
• Aurelia Tan

Póngales cero.

2. El gobierno de su padre fue el más corrupto de la historia

Imagen: Caricatura de Carlín

No lo decimos nosotros. Lo dice la gente, lo dicen los ránkings, lo dicen los que saben.

Recordemos que un informe de Transparencia Internacional -que ahora la lidera el peruano José Ugaz- ubicó a Alberto Fujimori como el séptimo presidente más corrupto de la historia del mundo mundial.

Foto: La Nación de Argentina

Hace poco, en entrevista con Perú21, precisamente Ugaz respondió esta pregunta: ¿cuánto le robaron Fujimori y Montesinos al país?

Hay distintas versiones: las más conservadoras hablan de US$600 millones; las más audaces, de US$6 mil millones. Alfonso Quiroz, en su libro Historia de la corrupción en el Perú, calcula que fueron US$4 mil millones. Una buena parte de ese dinero fue para Fujimori; otra, para la organización criminal que montó con Montesinos, y otra se la llevaron los distintos actores de su red. Yo me pregunto: ¿de qué ha vivido Fujimori todos estos años?, ¿con qué pagó sus abogados?, ¿con qué pagó sus campañas?

Ojo que una encuesta de GfK reveló que el 47% de la población considera que el régimen del hoy preso en la Diroes fue el más corrupto del Perú.

3. El Perú no era el país más seguro ni el más estable en los 90

Otra de Carlín porque son precisas.

Y todo eso es por la corrupción y el crimen organizado que nos gobernó, según el presidente de Transparencia Internacional en esa misma entrevista:

Cualitativamente, hoy el crimen organizado no nos gobierna, como sí lo hizo en los 90. Cuantitativamente podemos tener igual o mayor corrupción económica.

En esta nota de La República, un grupo de economistas -a propósito del libro de Quiroz- remarcan todo lo que ocurrió durante el  gobierno de Fujimori y cómo destrozó la economía por la corrupción:

La pobreza se situó en un 60% , se desapareció a los sindicatos y gremios laborales, y los despidos masivos generaron un alto nivel de informalidad que hoy lo vivimos en el transporte público y comercio.

Detalles más, detalles menos. Si seguimos buscando seguro encontramos más razones y más hechos que Keiko Fujimori debería tener en cuenta para sus próximas calificaciones anuales.