noticias , politica Martes, 9 septiembre 2014

Celebrity Deathmatch: Marisa Glave vs Cipriani vs el Corredor Azul

¿Ahora el bendito Corredor Azul también es el culpable de que las familias pasen menos tiempo juntas? Esta es la nueva guerra por la reforma de transporte de la que, faltaba más, el Cardenal Juan Luis Cipriani opinó. Y Marisa Glave respondió.

Fight.

Fight.

ROUND 1: El Cardenal contra la reforma

Como nos tiene acostumbrados, el Arzobispo de Lima criticó al Corredor Azul en su programa Diálogos de Fe en RPP Noticias. ¿Qué dijo? Este fue su mensaje por si no lo escuchaste (que es lo más probable):

«Cuánta gente se la pasa en el micro o en estos corredor azules, se la pasan horas viajando o quizás durmiendo para poder llegar a su casa«

Como ya explicamos en un post anterior, las fallas de este nuevo sistema de transporte son más que evidentes. Sin embargo, el cambio tenía que ocurrir tarde o temprano. Ese no es el punto ahora. Cipriani no concluyó ahí. Se siguió despachando contra el Corredor, culpable –al parecer de la desunión de las familias limeñas y el por qué los hijos andan solos:

«Esta manera de trabajar actual, que no era antes así, hace más difícil que tú o cualquiera esté con su esposo o con sus hijos, compartir un poco más de tiempo. Esto no era así ni es necesario que sea así. (…) Toda la organización social: horarios de trabajo, sueldos, modos de trabajo, todo atenta con que la familia se pueda reunir. A ti te sacan de tu casa a las 4 a.m. Tu mujer probablemente también trabaja. Los hijitos se quedan quizás un poquito solos…»

¿Cipriani se movilizará en transporte público y habla como un afectado más? Alguien tendría que responderle.

 

ROUND 2: Que nos muestre su polo amarillo

La respuesta vino pero de alguien que está fuera (y hasta diríamos que lejana) de la campaña. Para la exregidora Marisa Glave esto parece una «cruzada» en contra del sistema que ha implementado la Municipalidad de Lima. A través de su blog en La Mula le mandó su kikouken en un post titulado Los diablos azules del Cardenal.

Sería bueno que el Cardenal se enterara que en el sistema anterior, que parece recomendar, los trabajadores del transporte – choferes y cobradores – debían circular por la ciudad entre 14 y 18 horas al día para poder conseguir lo suficiente para vivir, ellos y sus familias, sin ningún tipo de estabilidad, ni seguro de salud, a merced de las mafias del transporte. ¿Por qué nunca se preocupó porque esos trabajadores, y sus familias, pudieran pasar más tiempo juntos? Sería bueno que el señor sepa que el sistema que obligaba a una persona a manejar más de 14 horas una combi en el caos del transporte limeño y en la lucha por el pasajero, ha generado miles de accidentes, destruyendo miles de familias y proyectos de vida.

Ouch. ¿Este discurso no se parece a las constantes quejas de los que están en contra de la Reforma? Esto agrega Glave:

Está claro que el señor no está hablándole a sus fieles, ni está preocupado por mejorar el servicio de transporte público (que evidentemente en el Corredor Azul requiere perfeccionarse y convertirse en un sistema integral que facilite la movilidad de los limeños) sino que el señor le habla a los electores y desde una tienda específica. Señor Cipriani, cuando decida inmiscuirse en la política electoral sería bueno que se quite la sotana y nos muestre su polo amarillo.

¡Aja!

Seguimos esperando la respuesta de Cipriani (o su streap-tease enseñando el polito amarillo, lo que ocurra primero).