5 cosas que no sabías de la ONAGI (la exoficina Dacia Escalante)

Dacia Escalante, exdirectora de la ONAGI

Toda la semana hemos escuchado repetir ONAGI una y otra vez sin que quede muy claro qué quiere decir ni por qué se ha vuelto tan importante en estos días.  Aquí te explicamos clarito todo lo que tienes que saber sobre esta oficina

1. ¿Qué rayos es la ONAGI?

Estas siglas hacen referencia a la  Oficina Nacional de Gobierno Interior. Su función es coordinar con Gobernadores Regionales, provinciales, distritales hasta a los miembros de las rondas campesinas. Actúa como un vínculo entre el gobierno central y las regiones. Lastimosamente, las cosas no salieron como se esperaban y esta es la actual situación de esta oficina:

2. Su creador es Humala

La Onagi nació, oficialmente, el 10 de diciembre del 2012, con el gobierno de Ollanta Humala. Antes de eso era la Dirección General de Gobierno del Interior (DGGI) y era una entidad ejecutora subordinada a las direcciones del Ministerio del Interior. Hasta entonces, nadie sabía muy bien de qué se encargaba ni que que existía.

3. Ascenso de nivel

Ante las quejas de falta de autonomía, pasó de ser una unidad  dependiente del Ministerio del Interior a convertirse en un  órgano público ejecutor, «con autonomía administrativa, funcional y económica, que en el ejercicio de sus funciones». Sin embargo, la autonomía no fue bien manejada y empezaron los problemas.

4. Lluvia de millones

El presupuesto de la Dirección General de Gobierno Interior, al segundo semestre del año 2011, era de 45 millones de soles. Para el 2014, la nueva Oficina Nacional de Gobierno Interior cuenta con 85 millones de soles. Lo más llamativo de esta oficina es que gracias a una norma, se otorgó facultades a los gobernadores para adjudicarse premios no recogidos en sorteos para obsequiarlos a “poblaciones vulnerables”. Esta iniciativa al final solo sirvió para beneficio de la misma ONAGI.

5. Una sola dirección

Desde su creación, a fines del 2012, la ONAGI solo tuvo una directora: Dacia Escalante quien ha sido acusada de obligar a los gobernadores regionales para que vengan a Lima a celebrar el Fallo de la Haya, y de despedir a los que denunciaron el hecho. Después de la serie de reportajes que demostraron que en la ONAGI había más de un acto de irregularidad, Dacia Escalante tuvo que renunciar la semana pasada. Una de las acusaciones más graves en su contra señala que  habría cobrado 29 mil nuevos soles por concepto de “compensación vacacional” de los años 2011 y 2012, así como vacaciones truncas de 2013, cuando no le correspondía.