internacionales , politica Jueves, 20 febrero 2014

Cómo pegarla de equilibrado con una realidad desequilibrada

Hoy he visto a mucha gente indignada, realmente furibunda, por esta caricatura de Carlín:

carlincatura-carlin

Lo cierto es que ayer, nuestro mejor caricaturista había publicado esta:

carlincatura-carlin-1

Y, claro, se podría decir que se trata de adoptar una posición balanceada ante una situación complicada. Carlín –a quien muchos han acusado injustamente de chavista hoy– es el ejemplo más gráfico de la postura de mucha gente que intenta ser balanceada ante lo que pasa en Venezuela.

Quizás las críticas se deben a que lamentablemente, la realidad, casi nunca, está balanceada. Menos en asuntos políticos.

Sobre esto tengo algunas ideas en borrador, que me gustaría afinar con ustedes en este post. Por suerte, los peruanos tenemos un ejemplo práctico que podemos aplicar perfectamente a la situación, salvo que estemos ideologizados más allá de toda lógica: Fujimori. Hagamos el ejercicio de remplazar a Capriles por el Toledo de los Cuatro Suyos en la caricatura de arriba. ¿Cómo se vería? O, como dice Yrigoyen:

Esa gente de izquierda (de izquierda entre comillas) que se la pasa anunciando el golpe fascista en Venezuela y afirmando que Leopoldo López es un agente de la CIA es igualita a esos redactores de los diarios chicha que en el 2000 titulaban «Pituco Andrade pide tanques para aplastar madres» o «Nerviosón Castañeda pide consejo a Jimmy Santi para mitin». La única diferencia es que esos redactores lo hacían por un sueldo, mientras que los del face lo hacen gratis de puro tontos útiles.

El ejemplo con Toledo o Castañeda me gusta. En el 2000, ellos eran la oposición a (y las víctimas de) un gobierno autoritario. No les tomó mucho tiempo, una vez en el poder, en revelarse como unos impresentables. Pero creo que no está en discusión –salvo para otro tipo de fanáticos más allá de toda lógica– que nuestro régimen democrático, con todos sus tumbos y sus decepciones, es mucho mejor que el autoritarismo fujimorista.

La oposición venezolana no es perfecta. Bueno, en realidad, es atroz. La conozco de cerca (¿ya todos se olvidaron de Carmona?). Pero es lo que hay. Vamos, amigo de izquierda, no me digas que ya te olvidaste que marchabas codo a codo con el Apra en los 90. No te hagas.

Y sí, la comparación con Fujimori es correcta (la verdad, después de ver los videos que todos –menos los venezolanos– hemos visto, tengo la tentación de decir que Fujimori no se hubiera atrevido a tanto). Aunque te joda, tanto Fujimori como Maduro son el resultado de «elecciones» «democráticas» bastante cuestionables (no por sospechas de fraude, o no sólo por eso, sino porque los ganadores fueron los que tenían el manejo de todos los poderes fácticos).

A ver, en realidad todo lo que quiero decir lo ha dicho mejor Felipe Davis

…está muy bien y muy lindo que uno tenga opiniones diversas y contrastantes, pero por ahí vemos que muchos están hablando de una falsa equivalencia en Venezuela. De como «ambos lados han cometido excesos» «ambos lados tienen sus backers» «ambos lados controlan a su prensa» y POS NO. Maduro controla de facto los poderes del estado, la prensa y el ejercito. Si a alguien se le tiene que pedir que le baje la espuma a su chocolate es a ÉL.

Una cosa es el análisis desapasionado de la realidad y, otra, muy distinta, es pretender que esa realidad está «balanceada». Como dice Charlie Skinner, el balance no tiene nada que ver con la verdad, la lógica o la realidad.