politica Miércoles, 22 abril 2009

Pobre Venezuela

Una de las cosas que no se comenta mucho fuera de Venezuela es que su  oposición es casi tan mala como Hugo Chávez y mucho más torpe. Luego del golpe del 11 de abril del 2002, no tuvieron mejor idea de remplazar a Chávez con ¡¡el presidente del equivalente venezolano de la Confiep!! Por poner un ejemplo, nomás.

Ahora el Perú ha tenido el privilegio de ver a uno de los opositores venezolanos en toda la extensión de su lucidez. El señor Manuel Rosales viene escapando de la opresión chavista y nos pide asilo. Hasta ahí todo muy bien. Pero esta mañana…

Cualquiera sabe que pedir asilo es un tradición muy delicada en Latinoamérica. Evidentemente, el asilado debe mantener cierto perfil bajo para no enturbiar más la relación entre los dos países. Con sus insultos y morisquetas, Rosales no solo no se ayuda a sí mismo, sino que pone al Perú en una situación complicada. Han hecho bien el Canciller y el Premier Becoming Jane release en cuadrar a Rosales. Que le den el asilo, pero que se calle.

En fin. Un buen ejemplo de cómo las cosas nunca son en blanco y negro.