noticias Domingo, 18 enero 2009

Calumnista de Perú.21

Primera entrega de «Perú 2.1», una columna más bien dirigida al amplio público que todavía no le entra a esto de Internet:

El origen secreto del tricampeonato de Chang

(O de cómo funciona esto de los destapes blogueros)

Varios de los acostumbrados recuentos findeañeros incluyeron – al borde de la incredulidad – alguna mención a la influencia de los blogs en la agenda mediática local. Augusto Álvarez Rodrich les dedicó una columna entera : “el 2008 fue el año del boom de los blogs. De ahí salieron varias primicias que dieron que hablar y que movieron el ambiente periodístico.”

¿Y cómo lo hacen? ¿Los financia la izquierda chavista radical? ¿Giampietri los puso en la planilla de Bussiness Track? Peor aún: lo hacen gratis y, a veces, sin afán de reconocimiento.

Veamos un ejemplo emblemático: El Divertido Caso de Chang, el Tricampeón

Como recordarán, en febrero del año pasado se reveló que el ministro de Educación, José Antonio Chang, no solo había obviado de su currículum su paso por la Universidad Católica, sino que este tránsito había sido un vía crucis que culminó en el calvario de cuatro tricas jaladas (o sea, cuatro cursos desaprobados tres veces cada uno). Todos sus rojos, que incluían, por ejemplo, un 05 en Matemáticas Básicas 3, fueron expuestos en Internet precisamente cuando el ministro se enfrentaba a otros rojos: los del SUTEP.

Pues bien, la historia empezó bajo el formato más común y silvestre: el comentario anónimo. Un incógnito lector del blog Pepitas le dejó este dato : “Pepas, hay otra bomba, parece que a José Antonio Chang lo botaron por bruto de una conocida universidad.” Eso fue suficiente. El maligno bichito del chisme político se había apoderado de la cholósfera.

El siguiente paso lo dió Desde el Tercer Piso, otra conocida bitácora. Su autor confirmó – indagando entre ex alumnos – que los jalados ocurrieron entre el tercer y el quinto ciclo de su corta carrera en la PUCP. La confirmación encendió de excitación al Twitter (¿Y qué es Twitter? Es tan difícil de explicar como la cara de Nakasaki. Digamos que es una mezcla de blog, Hi5, chat y mensaje de texto. Muchos blogueros lo usan para comunicaciones súper inmediatas y semi privadas.)

Días después, el twittero @elmorsa anunció que le habían mandado por e-mail las ansiadas notas pero que no sabía qué hacer con ellas. Otro twittero, @amnesico , sugirió que se suban a Rapidshare (un servicio para compartir files con los amigos). Así, la pequeña pero afanosa comunidad Twitter accedió a las notas y, al parecer, uno de sus usuarios – nunca identificado – se avivó y publicó las notas en Scribd (una especie de YouTube para documentos en PDF).

Finalmente, desde Francia, el usuario @reagno decidió modificar el artículo en Wikipedia sobre el ministro. Escribió la historia de su tricampeonato y agregó el enlace hacia el documento en Scribd. A partir de ese momento, el maravilloso argumento ad hominem contra Chang era absolutamente público. Los medios hicieron fiesta al día siguiente.

En resumen: al menos seis personas que no necesariamente se conocen “de verdad”, que no necesariamente estaban en el país y que no son periodistas ni políticos, integraron una cadena virtual que usó seis servicios gratuitos de Internet (blog, twitter, email, rapdishare, scribd y wikipedia) para construir y publicar una información que ellos consideraban políticamente pertinente. Cuatro de ellos lo hicieron anónimamente y para esta columna conseguí que tres de estos me autorizaran a revelar su intervención en esta singular cadena. La fuente original, el comentarista de Pepitas, continúa anónimo. Tan anónimo como usted podría serlo al dejar un comentario en este blog de www.peru21.pe (vamos, conéctese, que desde la versión web usted puede darle click a cada uno de eslabones de esta historia y, quien sabe, hasta dejar el dato que se convierta en la próxima bomba virtual).