discriminación , literatura Jueves, 24 julio 2008

Jockey Plaza veta a presos escritores

Este Carlos Álvarez no vive en la comedia, sino en la tragedia. Él es el heredero de la labor del padre Hubert Lanssiers en la asociación Dignidad Humana y Solidaridad y se ha pasado todo el día de hoy tratando de convencer a los directivos del Jockey Plaza, la sede de la FIL, de que autoricen el ingreso de tres internos de Castro Castro, ganadores de un concurso literario.

Aunque la Defensoría y el INPE han dado todas las garantías, Álvarez no pudo convencer al Jockey Plaza y conversó con Útero TV.