blogs , sociedad , violencia Martes, 6 mayo 2008

El otro lado de Casapalca

pol2.jpgEl lío en Casapalca ya ha durado demasiado y ni siquiera el cuco de los sindicatos, Aldo Mariátegui, se ha puesto del lado de la minera. De verdad es entendible la lucha de los trabajadores, pero los dirigentes se exceden:

Claudio Boza, dirigente del Sindicato de Trabajadores Mineros de Casapalca, señaló que cientos de trabajadores de la minera, junto a sus familiares, bloquearon la Carretera Central, a la altura del kilómetro 130. Pero esta vez la protesta llegará hasta el final, según afirmaron a LA PRIMERA los manifestantes. De no solucionar sus reclamos, radicalizarán hoy sus protestas, ya que, indica, “derramaremos nuestra sangre con tal de que nuestras familias tengan ­una mejor calidad de vida”.

Y, claro, esas protestas tienen consecuencias. Si no, pregúntenle al papá de M. Isabel Guerra (ex Danza Invisible):

Yo me pregunto si mi padre, una persona de más de 70 años que sufre de problemas cardiacos y que no tiene absolutamente nada que ver con ninguna patronal, merecía la odisea de caminar durante horas, sin alimentos ni bebidas, a 4,200 metros de altura, para sortear el bloqueo de la carretera central que efectuaron hoy nuevamente los trabajadores de Minera Casapalca.

Mi padre regresaba de un viaje de emergencia, y el ómnibus en el que volvía, al igual que cientos de otros vehículos, quedó varado en las alturas de Casapalca. Mi padre, una persona muy noble, comprende la situación de los mineros explotados; él mismo fue sindicalista en su juventud, y uno de los fundadores del original y primigenio SUTEP. (…)

El tema de Casapalca es muy serio y complejo y no voy a discutirlo acá porque es tema de otro análisis. Pero lo que yo me temo es que estos plantones son puramente una medida publicitaria. Un muerto es muy efectivo para “jalar titulares”. Muchos muertos, más aún. Y como ya murieron trabajadores, si en esta ocasión los muertos fuesen ajenos, pues muchísimo mejor. (…) la imagen de sí mismos que están dando al país y al mundo es la de un grupo de intransigentes radicales al que no se puede prestar oídos. Con lo cual ellos mismos caricaturizan su causa y crean anticuerpos hacia su lucha sindical.

Conozco ya varios casos de personas que han tenido que caminar kilómetros y kilómetros en la altura porque alguna protesta no dejaba pasar sus ómnibus. ¿Alguno de los presentes?

Blog: Hace un tiempo Tanaka armó un post/dossier sobre los métodos de las protestas