Popy no se va, no se vaaaaaa
Me gustaría decir que lo voy a extrañar.
foto: Dawn Olivera
Lamentablemente, no lo voy a extrañar, porque no se va a ir.
Fernando Olivera es un animal político, en toda la extensión del término, y aunque su votación haya sido misérrima, tenemos Popy para rato.
Y es que, gane Humala o gane García, el próximo gobierno se presenta como terreno fértil para sus apariciones, conspiraciones y demoliciones.
Si les sirve de consuelo, la buena noticia es que -al menos por esta vez- su sueldo no lo pagaremos los contribuyentes.